Publicado: mayo 21, 2025, 6:07 am
Las inspecciones policiales en los clubes cannábicos del sur de Tenerife traspasaron el enfado de Mohamed Derbah -algunos eran suyos y otros gozaban de su protección- que refleja la Policía Nacional en sus informes para dar paso a comportamientos «delictivos». Había un objetivo: «pararle los pies» al inspector que comandaba las intervenciones. Quien pronuncia esta frase es, según el informe de Asuntos Internos, el ex presidente y actual vicepresidente segundo del Parlamento de Canarias Gustavo Matos (PSOE) que, resaltan los investigadores, actuaba «en favor de los intereses de Mohamed Derbah». «Se evidencia su disposición a intervenir en favor» del empresario libanés encarcelado por liderar una red de narcotráfico con la que la Policía vincula al político. Según Asuntos Internos, es el propio Derbah el que frena a Matos y así lo refleja en otro de los informes que integran las diligencias. «Derbah le advierte que llevar a cabo cualquier actuación en este momento, dadas las circunstancias actuales, podría generar sospechas y revelar su implicación en la maniobra, por lo que insta al cargo político a proceder con cautela y discreción».
Sin embargo, ante el incremento de las inspecciones a los clubes de cannabis Mohamed Derbah comienza a impacientarse, indica el dossier de Asuntos Internos, y lanza una advertencia directa al cargo político. «Le manifiesta que, si no se logra frenar las actuaciones policiales en curso, se producirá ‘algo grave’». Y continúa: «Dicha afirmación, expresada en un tono categórico, podría interpretarse como una amenaza velada o una advertencia coactiva, lo que, en el contexto de la investigación, refuerza la presunción de que Derbah busca ejercer presión sobre la autoridad política para que intervenga en favor de sus intereses». Comienza la quema de coches al sur de la isla. «Mohamed Derbah manifiesta que, como consecuencia de las actuaciones llevadas a cabo, se produjo la quema de varios vehículos. Asimismo, añade que dicho suceso constituye un ‘mensaje de advertencia’ en respuesta a dichas intervenciones, lo que sugiere una posible intimidación o represalia frente a las acciones policiales o administrativas adoptadas en relación con los clubes cannábicos».
La policía ha atribuido la oleada de incendios a una amenaza de la trama de narcotráfico por el cierre de los clubes cannábicos.
Mohamed Derbah.- Eso es verdad, quiere ganar puntos. Quiere ganar puntos delante de la Comisaría. ¿Qué le haces? Delante de la Comisaría quemaron 5 o 6 coches, es un mensaje (…) Entonces aquí hay un problema, cerró todo, cerró todo, todo ahí. ¿La gente dónde está fumando ahora?
El destinatario de estas reflexiones es Gustavo Matos quien, a juicio de la Policía, «parece tener conocimiento previo» de esta circunstancia, lo que sugiere a los agentes que «la relación no es reciente». Seguidamente, Matos manifiesta comprender la situación, expresando que las inspecciones estarían comprometiendo la capacidad de Derbah para ejercer su supuesta protección sobre los clubes cannábicos, «lo que podría afectar el control que mantiene sobre dichas actividades».
Gustavo Matos.- Sí porque… perdona, pa yo entenderlo, tú quedas mal porque tú estás protegiendo a esta gente, los están puteando, entonces: Oye Mohamed, ¿qué pasa?
Y Derbah manifiesta «abiertamente que es él el que controla la delincuencia del Sur de la isla, siendo conocedor el cargo político de ello».
M.D.- Exacto. La gente quiere salir contra la Policía, va a ir a la calle y yo no voy a permitir eso, nadie puede protegerlos en el sur, solo yo. Entonces…
G.M.– Eso está claro, el que mantiene ahí el orden y que la gente vaya tranquila por la calle y no les atraquen, eres tú. Estamos de acuerdo.
Mohamed Derbah en su despacho.E. M
En ese momento, Mohamed Derbah, «en un tono que denota advertencia», vuelve a decirle a Matos que, en caso de no cesar las actuaciones en curso, «se van a producir muchos incidentes».
La conclusión que hacen los agentes en este informe es demoledora: «Se respalda abiertamente una estrategia de generación de alarma social mediante la quema de vehículos (…) con el fin de condicionar políticamente la actuación de las Fuerzas de Seguridad» Y finaliza: «Hay comisión de delitos contra el orden público para facilitar el narcotráfico de la organización de Mohamed Derbah, intentando evitar las consecuencias legales de su persecución por parte de la Policía».
