Publicado: marzo 23, 2025, 11:07 am
El Puente Viejo de Talavera de la Reina, derrumbado en dos tramos en la madrugada de este domingo por la crecida del Tajo a causa de la borrasca Martinho, es uno de los más antiguos de la provincia de Toledo, pues la primera referencia de su construcción data del año 1227.
Según el Ayuntamiento de la ciudad, el Puente Viejo de Talavera, denominado también puente de Santa Catalina, tiene una longitud de 61 metros y una altura de 4, y fue el rey Fernando III quien dio la orden de controlar el flujo comercial en los puentes que cruzaban el Tajo.
Los documentos de la época reflejan que el puente pudo albergar unos 22 arcos, gran parte de ellos distintos entre sí dado que se fueron modificando durante el transcurso de las obras de reconstrucción a lo largo de los siglos.
De hecho el puente contaba con arcos de medio punto, alzado peraltado, media circunferencia o perfil apuntado.
A lo largo de su historia el puente ha sido objeto de diferentes obras de conservación.
En la primera mitad del siglo XV el puente se encontraba muy deteriorado por lo que el Concejo, una institución municipal responsable directa de la vecindad que imperó en el periodo medieval, emprendió una serie de reformas para su reconstrucción.
Están documentadas las obras que se realizaron entre 1450 y 1459.
Durante el siglo XIX el Puente se vio afectado en algunos tramos a causa de las lluvias por lo que fue objeto de reparaciones en los años 1815, 1835, 1841 o 1850 según consta en el Archivo Municipal de Talavera.
También, según el Consistorio talaverano, se tiene constancia documental de la aplicación de pontones y entablados de madera que se llevaron a cabo entre el siglo XV hasta el XX.
Desde el siglo XVII se empezó a utilizar en la reconstrucción el ladrillo de tejar, y a partir de la primera mitad del XX el Puente Viejo fue reforzado con ladrillo de gafa y mortero de cemento, al tiempo que se instalaron vigas de metal entre los vanos de las pilas para soportar el tablero.
A comienzos del año 2000, cuando se puso en marcha el proyecto de Ordenación hidráulica del río Tajo entre Bolarque y Talavera, el puente se fue adaptando para que lo utilizaran ciclistas y peatones.