Publicado: septiembre 4, 2025, 4:07 pm
El juez de Primera Instancia e Instrucción 1 de Solsona ha decretado prisión provisional para el tío del motociclista Marc Márquez, el comandante de la Guardia Civil y el dueño de un taller en Cervera (Lleida) acusados del asesinato de un contrabandista en 2022 en la Baronía de Rialb, en una zona inaccesible de los montes leridanos.
Los tres fueron detenidos este martes, acusados de encargar a un sicario el asesinato del contrabandista Joan Coromina Estany, de 61 años. Ninguno de ellos ha declarado, ni ante los Mossos d’Esquadra, ni ante el magistrado, que ha dirigido una compleja investigación que se ha acelerado en los últimos meses, tras tres años prácticamente parada y con la bala homicida como única prueba.
Coromina fue asesinado el 25 de enero de ese año en una finca prácticamente inaccesible de los bosques de la Baronía de Rialb (Lérida). El hombre, legalmente empresario pero en realidad dedicado desde hacía décadas al contrabando, había dejado las tareas que estaba realizando y se disponía a comerse una manzana cuando alguien, presumiblemente un sicario, le disparó una sola vez, a más de 100 metros de distancia, y le acertó en el corazón.
El proyectil que le quitó la vida, que quedó enterrado a dos metros de él tras atravesarle el pecho, fue durante años la única pista sólida en manos de los Mossos d’Esquadra, y también de agentes de la Guardia Civil, que se involucraron rápidamente en la investigación dado que desde el principio se advirtió que Corominas, un hombre habitualmente investigado por las autoridades, alternaba con miembros del cuerpo.
Tres años y medio después, tras una complejísima investigación y con un también complicado dispositivo simultáneo, los agentes detuvieron el pasado martes, como principales implicados en el asesinato, a R.A.C., tío político de Márquez y muy cercano al deportista, ocho veces campeón del mundo de motociclismo; a F.G.P., comandante retirado de la Guardia Civil, y a N.G.B., dueño de un taller mecánico en Lleida.
El familiar de Márquez, vecino de Cervera (Lleida), era de hecho considerado como la persona más cercana al fallecido de los tres detenidos, y en realidad uno de sus amigos más próximos, según ha podido saber este diario.