Publicado: octubre 16, 2025, 12:07 pm
Koldo García seguirá en libertad y con las mismas medidas cautelares que hasta ahora tras comparecer este jueves ante el Tribunal Supremo para ser interrogado por su papel de «gestor y custodio» del dinero del ex ministro José Luis Ábalos. Como el ex dirigente socialista, ha rechazado responder a las preguntas del magistrado Leopoldo Puente y el fiscal jefe de Anticorrupción, Alejandro Luzón.
El investigado ha llegado al Alto Tribunal sabiendo que las posibilidades de ir a prisión se habían reducido considerablemente, puesto que Ábalos salió ayer del Supremo por su propio pie, si bien con un duro auto del instructor en la mano: los indicios de delito se han reforzado. Vuelve a sostenerlo en el auto dictado hoy: «Persisten, e incluso aparecen seriamente consolidados tras el último informe rendido en la causa por la fuerza policial actuante (de fecha 3 de octubre del presente año), sólidos indicios de criminalidad con relación con la persona del investigado don Koldo García Izaguirre».
Respecto al último informe de la UCO que ha provocado la nueva citación en el Supremo, el juez indica que apunta a la «posible tenencia por parte del investigado de importantes cantidades de dinero en metálico, indiciariamente procedentes de las actividades delictivas» que se le imputan.
Recuerda que, según ese reciente informe, Koldo «vendría haciéndose cargo regularmente de obligaciones económicas correspondientes al Sr. Ábalos Meco». La lista es larga: pensiones alimenticias de uno de sus hijos, ingresos injustificados en las cuentas del ex ministro, regalos u otras atenciones familiares o allegados de Ábalos, pagos a su empleada doméstica, aportaciones económicas relacionadas con la Fundación Fiadelso del ex ministro, gastos de viajes…»Todo ello», indica el juez, «por una cantidad final de 94.883,63 euros». A eso se sumarían otros posibles pagos en favor de Ábalos, como el pago de casi 10.000 euros por el uso de un chalet en Marbella por importe de 9.800 euros.
Koldo García ha llegado al Supremo en taxi pocos minutos antes de las 10 horas, cuando estaba citado, acompañado de su abogada y portando una bolsa con más aspecto de contener ropa que documentación de descargo. Ante el instructor, ha explicado que ejercía su derecho a no declarar ante la imposibilidad de acceder a los audios que sustentan buena parte de los indicios de delito. Ha alegado que los necesita para conocer el contexto en que mantuvo las conversaciones que la Guardia Civil maneja en sus informes. La defensa del ex asesor de Ábalos ha reclamado insistentemente en la causa el acceso al contenido de todos los dispositivos que se le han incautado. Consisdera que así no está en un plano de igualdad con los investigadores.
El auto dictado este jueves hace mención de esas grabaciones, que fueron objeto de un informe de la UCO emitido el pasado junio. Puente habla de las «muy expresivas y elocuentes grabaciones» atribuidas a Koldo, «de conversaciones de las que resultaría la posible adjudicación indebida de diversas obras públicas, en connivencia con quien era entonces titular del MITMA [Ministerio de Transportes], también investigado en esta causa, y de terceras personas, a cambio de diversos premios económicos».
Tras la no declaración, se ha celebrado la vista para proponer la modificación de las medidas cautelares que hoy pesan sobre Koldo García: comparecencias quincenales en el juzgado y prohibición de salir del país y que finalmente se han ratificado.
El fiscal jefe ha resaltado en su informe el contraste entre la locuacidad del investigado en los medios de comunicación y su silencio de hoy en el juzgado. La abogada de Koldo, Leticia de la Hoz, ha replicado diciendo que su cliente se veía en la obligación de responder a las acusaciones que oía en los medios. Se ha referido al acoso mediático que a su juicio sufre su cliente, incluyendo aspectos de su relación con su ex pareja, también investigada. El magistrado ha intervenido para cortar esa línea de discusión.
Al igual que sucedió el miércoles con Ábalos, la Fiscalía ha sostenido que los indicios de delito se han reforzado con el último informe de la UCO, pero que no se detectan los motivos que justificarían la prisión provisional: riesgo de fuga o de entorpecer la investigación. Por el contrario, ocho de las nueve acusaciones populares personadas, agrupadas en torno al PP, sí han pedido al juez que endurezca la situación procesal y le envíe a la cárcel, esta vez sin opción de quedar libre con fianza. El magistrado instructor resolverá a lo largo de la mañana y previsiblemente dejará las cosas como están.
El juez se ha alineado de nuevo este jueves con la Fiscalía, aunque anticipando que en un futuro no lejano sí podría acordar la prisión que se le reclama: «Es verdad -ya se dijo en la resolución dictada con fecha de ayer con relación al Sr. Ábalos Meco-, que el riesgo de que el investigado pudiera sustraerse a la acción de la justicia resulta creciente, conforme el conjunto de indicios de la posible comisión de graves delitos, sancionados con penas privativas de libertad muy significativas, se robustece; y conforme también se aproxima la fecha de celebración del juicio oral. Sin embargo, en este momento considera el instructor suficiente el mantenimiento de las medidas cautelares».
Chistorras y lechugas
En el informe que ha provocado la nueva citación, la Guardia Civil indicaba que el asesor utilizaba lenguaje en clave para hablar con su mujer de entregas en efectivo de origen «opaco». Así, hablaban de «chistorras» (billetes de 500 euros), «soles» (200 euros) y «lechugas» (100 euros), y de la «existencia de una contabilidad A y B vinculada a los gastos de Ábalos».
En los anexos del último informe que la UCO ha entregado al juez, Koldo se refiere en conversaciones con terceras personas a que se «mire cuántos folios» hay, en clara referencia al dinero en metálico. «¿Chistorras?», le contesta su interlocutora, que en numerosas ocasiones era su mujer. A lo que Koldo pide que quiere saber «en total» a cuánto asciende el montante. Por citar algunos ejemplos, el 8 de marzo de 2019, día Internacional de la Mujer, Koldo y su ex esposa Patricia Úriz protagonizaron una conversación sobre las chistorras y las lechugas en la que el ex asesor de Ábalos le preguntó «cuántos folios había» y ella replicó: «¿Chistorras?». «En total», le espeta Koldo. «Sí, todo. ¿Y lechuga?», vuelve a preguntar Úriz.
Asimismo, figuran continuas alusiones a que se apunten determinadas cantidades, por ejemplo, «1.800 euros» a la cuenta de «jefe B», le indica Koldo a su ex mujer. También hay mensajes en los que el ex asesor ministerial pide «un morado», en referencia a un billete de 500 euros y explica que va a acudir a la sede del PSOE a recoger más dinero. «Voy para Ferraz a recoger el sobre en coche y luego me llevan a casa», indicó en otra ocasión.
La defensa de Koldo García ha pedido esta semana la nulidad de la investigación al entender que los hechos que se están investigando exceden de lo que el suplicatorio del Congreso autorizó para el aforado Ábalos.