Publicado: marzo 30, 2025, 8:07 am

Acostumbrado a gestionar situaciones lÃmite gracias a las que ha ido construyendo su leyenda, Pedro Sánchez encara «los cambios tectónicos» en el mundo como una oportunidad para ejercer el liderazgo global de cabeza de la socialdemocracia europea. La polÃtica exterior le da más satisfacciones que la interior.
Sin embargo, el cambio de paradigma de Trump -inimaginable en el orden internacional desde el final de la Segunda Guerra Mundial- y la inédita situación que afronta la UE están resultando difÃciles de gestionar para el presidente del Gobierno español. Los obstáculos en su camino son de carácter interno y externo. Por una parte, el debate sobre el incremento del gasto militar no es precisamente el terreno ideal para la estrategia del PSOE, un partido «pacifista hasta la médula», en opinión de un destacado dirigente socialista.
Por otro lado, Sánchez tampoco comparte el acelerón belicista de paÃses como Francia o el Reino Unido, que ya hablan abiertamente de enviar tropas de la UE a Ucrania. Asà lo comunicaron Macron y Starmer tras la última reunión en ParÃs de la llamada coalición de voluntarios.
El jefe del Ejecutivo español no quiso hacer declaraciones al finalizar el encuentro. Fuentes de Moncloa resumen asà el momento complejo y difÃcil de la polÃtica exterior que Pedro Sánchez encabeza en persona con el apoyo en un escaso número de colaboradores. «El presidente no tiene ni quiere tener un discurso tan belicista como Macron y Starmer. ¿De qué se trata? Proponen enviar tropas, ¿qué tipo de tropas?, ¿a dónde?, ¿bajo qué mandato, la OTAN, la ONU?, No sabemos si habrá o no un acuerdo de paz. Los interrogantes a los que nos enfrentamos no permiten una hoja de ruta clara, son anuncios muy prematuros. Macron y Starmer tienen sus propios problemas internos que quieren compensar con anuncios de mucho impacto que no tienen en cuenta la compleja realidad del momento. Hay que garantizar la seguridad en Ucrania. La cuestión es cómo garantizarla».
Gastos militares
Otra cuestión distinta – «se está mezclando todo», se queja Moncloa- es la controversia sobre los gastos militares. Las citadas fuentes oficiales añaden que es «absurdo» pedirle al presidente un plan concreto para aumentar los gastos de Defensa cuando ni siquiera la UE dispone de una hoja de ruta sobre el particular. Otro de los incendios que Moncloa se ha visto obligada a apagar ha sido la declaración del secretario general de la OTAN en la que aseguraba que Sánchez se habÃa comprometido con él a llegar al 2% del presupuesto para Defensa en el verano. A petición expresa del Gobierno, Rutte rectificó sus declaraciones. «La OTAN está en una situación delicada y la gestión de Rutte es muy cuestionada desde que visitó la Casa Blanca y no replicó cuando Trump habló de su intención de quedarse con Groenlandia, que pertenece a un paÃs miembro de la OTAN», señalan fuentes gubernamentales.
Tanto los colaboradores de Sánchez como dirigentes socialistas de las federaciones admiten que la conversación pública sobre el aumento del gasto militar, y no digamos la posibilidad de un envÃo de tropas española a Ucrania, son asuntos «difÃciles» para el PSOE y requieren mucha pedagogÃa en un paÃs mayoritariamente pacifista.
«Somos muy conscientes de que tenemos la obligación de llevar al ánimo de los ciudadanos el peligro de la guerra y la necesidad de que la Unión Europea refuerce su seguridad teniendo en cuenta lo imprevisible de Trump. Tenemos que estar ahà y el presidente tiene la voluntad de estar en primera lÃnea. Pero también con prudencia. Cualquiera sabe que nosotros no somos señores de la guerra. Y el esfuerzo de pedagogÃa no es fácil».
En el ámbito interno, la última comparecencia de Sánchez evidenció que no dispone de mayorÃa en la Cámara para incrementar el gasto militar. Aunque el análisis posterior de Moncloa es optimista. «Salvo Podemos, el resto de los socios de investidura no muestran una oposición abierta para cumplir el compromiso de España ante los aliados», señalan los socialistas. La exigencia del PP de que Sánchez lleve al Congreso las partidas de gastos militares, una vez confirmado que no habrá Presupuestos este año, caerá en saco roto.
«¿De dónde se han sacado que es necesario llevar al Congreso decisiones que son propias y exclusivas del Poder Ejecutivo? Mariano Rajoy no fue al Parlamento a pedir autorización para el compromiso de llegar al 2% en el gasto en Defensa en la cumbre de la OTAN».
El lÃder de la oposición, Alberto Núñez Feijóo, piensa seguir percutiendo en la debilidad del Gobierno de Sánchez y su ninguneo del Congreso de los Diputados en materias tan relevantes como el aumento del gasto militar.
Armengol y el PP, juntos por un dÃa
La ex presidenta del Congreso Ana Pastor obró el milagro de sentar juntos en el mismo acto a los máximos dirigentes del PP y a la actual presidenta de la Cámara, Francina Armengol. Fue en el acto de presentación del libro que recoge los discursos parlamentarios de Ana Pastor, que fue vicepresidenta y presidenta del Congreso. El PP mantiene un cerco sin cuartel contra Armengol, el portavoz del Grupo Popular, Miguel Tellado, ha roto cualquier interlocución con la presidenta.
Pastor estuvo acompañada de toda la cúpula del PP, del ex presidente Rajoy y de muchos ex ministros de los últimos gobiernos del PP. Feijóo, que tomó asiento al lado de Armengol, aprovechó para criticar a Sánchez, sin citarlo y alabó el saber estar de Ana Pastor en su paso por la polÃtica. La ex presidenta del Congreso pidió «respeto institucional» e hizo un canto a la moderación como forma de hacer polÃtica. «La moderación no es una debilidad, sino una fortaleza», proclamó Ana Pastor.