Publicado: agosto 1, 2025, 10:07 pm
España no es una excepción. Si en buena parte de los paÃses europeos la inmigración se percibe como un problema hasta el punto de triunfar las polÃticas duras que abogan por los cierres de fronteras y las deportaciones masivas, los españoles se alinean con sus vecinos y, sin llegar a imponerse todavÃa las teorÃas del gran reemplazo abonadas por el trumpismo en EEUU, una contundente mayorÃa de votantes –el 63,6%– ya considera que existe un problema de integración en los migrantes que entran en territorio nacional.
Y de ahà al rechazo generalizado hay muy pocos pasos.
Una distancia que se puede recorrer fácilmente a la vista de la escasa acogida que deparan los ciudadanos a los argumentos que señalan que sin inmigración la envejecida población europea se verÃa mermada hasta en un 34% de aquà a finales de siglo y ello conllevarÃa gravÃsimas consecuencias.
Los votantes parecen no pensar a tan largo plazo y en el momento actual consideran que el flujo de migrantes puede generar más inconvenientes que oportunidades. Esta es la principal conclusión que se desprende del sondeo realizado por Sigma Dos para EL MUNDO.
Una encuesta que coincide con el auge de las propuestas antiinmigratorias impulsadas por la extrema derecha; con los graves episodios de xenofobia vividos recientemente en Torre Pacheco como reacción al ataque sufrido por un jubilado; con el rechazo de los territorios a acoger obligatoriamente a los menores migrantes que se agolpan en Canarias; con el flujo imparable de llegada de pateras y con la sensación de que el Gobierno no cuenta con una polÃtica efectiva para regular las entradas de personas sin papeles.
La opinión de que en España los inmigrantes plantean un problema de integración y no se acomodan a la forma de vida y las leyes del paÃs, es mayoritaria entre los ciudadanos independientemente de su afinidad polÃtica.
Un reciente sondeo de Sigma Dos para EL MUNDO arrojaba un resultado espectacular: el 70% de los españoles aboga por la deportación de los inmigrantes ilegales y ello incluÃa al 92% de los votantes del PP y al 57% de los del PSOE.
La encuesta actual muestra que la percepción de que los inmigrantes son un problema porque no se integran es mucho más acusada entre los electores de derechas, pero también es claramente perceptible entre los de izquierdas.
Curiosamente, son los votantes del Partido Popular los que más abiertamente señalan la inmigración como un problema -75,8%- superando incluso a los electores de Vox -74,1%-. Este deslizamiento de los ciudadanos de centro derecha hacia posiciones de rechazo a la llegada de inmigrantes explica en buena medida el endurecimiento de las propuestas de polÃtica migratoria del Partido Popular.
No obstante, también en el espectro de la izquierda la bolsa de votantes preocupados por la falta de integración es muy importante, principalmente entre los electores del PSOE -57,2%- y en menor medida entre los de Sumar -43,5%-.
Los votantes de este último partido son los únicos que mayoritariamente -53%- no consideran que los inmigrantes planteen un problema de integración en la sociedad española.
De hecho, casi la mitad de los encuestados -47,8%- considera que hay demasiados inmigrantes en España.
Y en este porcentaje se incluye un 58,8% de votantes del PP; un 75,9% de electores de Vox y un 33,9% de votantes del PSOE. Esta sensación de saturación se repite entre los ciudadanos al margen de su edad, de su nivel socioeconómico, de su religiosidad o del tamaño de la población en la que residen.
Se acentúa sobre todo entre los electores de entre 30 y 44 años y registra el porcentaje más bajo entre los mayores de 65 y entre los más jóvenes.
Las mujeres se apuntan en mayor medida que los hombres a esta afirmación: un 49,5% frente a un 46,1%.
De la misma manera, y probablemente bajo la influencia de los recientes sucesos de Torre Pacheco, siete de cada diez votantes -72%- cree que en España existe un problema con los grupos que abanderan teorÃas xenófobas y racistas.
El porcentaje crece hasta el 78,4% entre los electores más jóvenes y hasta el 74,7% entre los de más de 65 años. Los más convencidos son los afines a Sumar -93%-, seguidos de los socialistas -85,2%- y los populares -65,1%-.
Por el contrario, los votantes de Vox rechazan muy mayoritariamente -58%- que este problema exista.
Esta percepción respecto a los grupos xenófobos se complementa con la impresión muy mayoritaria -62%- de que asistimos a una normalización de los discursos de odio al inmigrante.
El 90% de los votantes de Sumar; el 78% de los del PSOE y el 49% de los del PP, asà lo creen. En este punto también destacan los electores de menor edad.
Los votantes afines a Vox se separan de esta tendencia: en su caso un 63% opina que este tipo de mensajes antiinmigración no están prendiendo en España.
Los que consideran que el número de inmigrantes que reside en España es adecuado apenas alcanzan a la cuarta parte del electorado -26,2%- e incluye a un 24,7% de votantes del PP; un 30,5% del PSOE y un 42,5% de Sumar.
Los votantes de Vox que se muestran conformes con la cantidad de inmigrantes que viven en España es mucho más reducido, sólo un 14%.
En cualquier caso, la idea de que el paÃs necesita la llegada de más personas extranjeras es la menos respaldada. Sólo un 18,5% de los encuestados aboga por ello.
Destacan a favor de este planteamiento los electores de Sumar -33,6%- seguidos por los del PSOE -29,9%-. Los votantes de entre 18 y 44 años son los más reacios a un aumento de la inmigración.
Pese a todo, la sensación de que España requiere de más personas llegadas de fuera ha aumentado perceptiblemente en el último año y medio. AsÃ, si quienes a finales de 2023 consideraban necesario contar con más inmigrantes suponÃan el 14,4% de los votantes, en julio de 2025 el porcentaje crece nada menos que en cuatro puntos hasta situarse en el 18,5%.
En relación con la necesidad que tiene el paÃs de recibir más personas de otras latitudes dispuestas a trabajar en los sectores menos apreciados por los españoles como son la hostelerÃa, el cuidado de personas mayores, la agricultura o la construcción, más de la mitad de los encuestados -56,4%- reconoce que sin migrantes difÃcilmente se cubrirÃan estos empleos.
Sólo un 37,6% considera que sà habrÃa mano de obra nativa dispuesta a dedicarse a estos trabajos. Los más convencidos -56,4%- de que los españoles, a falta de inmigrantes, aceptarÃan cubrir estos empleos son los votantes de Vox, seguidos por los del PP -47,4%-. Esta apreciación desciende drásticamente entre los electores de PSOE y Sumar: 28,3 y 18,8% respectivamente.
Los votantes más jóvenes, de entre 18 y 24 años -quizá porque son los que más dificultades afrontan a la hora de acceder a un primer puesto de trabajo-, son los que en mayor número consideran esta posibilidad -42,4%- frente a los mayores de 65 años entre los que sólo un 30,6% lo considera probable.