Publicado: marzo 8, 2025, 9:07 am

La Policía Nacional y los Mossos d’Esquadra han desarticulado una organización yihadista en una operación conjunta con la Polizia di Stato italiana que se ha saldado con once detenciones, diez en Barcelona y su área metropolitana y una en Piacenza (Italia).
Los arrestos se efectuaron el pasado lunes por su presunta participación en delitos de enaltecimiento, apología, financiación y adoctrinamiento del terrorismo y por haber realizado «acciones previas orientadas a la selección de posibles objetivos«.
Se trata de la tercera fase de una investigación en que la Policía Nacional detuvo a cinco personas en 2022 y a 14 un año después. El dispositivo ha actuado bajo la dirección del Juzgado Central de Instrucción número 6 de la Audiencia Nacional y la coordinación de la Fiscalía de este órgano jurisdiccional.
Decapitación
Los arrestados fueron puestos ayer a disposición del juez, que decretó prisión provisional para cuatro de ellos. Según los cuerpos policiales, los detenidos formaban parte de un grupo radical pakistaní, «perfectamente jerarquizado y estructurado», que impartía consignas, a través de canales de comunicación encriptados, que «promovían el asesinato y la decapitación de las personas que fueran en contra de su doctrina». Su financiación incluía aportaciones económicas periódicas de los propios integrantes.
En sus publicaciones, enaltecían a terroristas que habían cometido atentados contra personas por supuesta blasfemia en Europa y Pakistán. La investigación constata que algunos de los miembros «ya habían comenzado a identificar personas en Europa como posibles objetivos». Es el caso de uno de los grupos de mensajería instantánea coordinado por una de las arrestadas y «compuesto en su totalidad por mujeres».