Publicado: junio 1, 2025, 4:07 am

Desde el miércoles, Carlos Mazón ya tiene Presupuestos. Desde hoy, Carlos Mazón es un pato cojo. A partir de ahora, el presidente de la Comunidad Valenciana comienza la cuenta atrás para su salida del cargo. Así lo creen en el PP y así lo contemplan en su equipo. Es una cuenta atrás indeterminada, pero segura. «Será antes o será después, pero Mazón se tendrá que ir y no será el candidato en 2027», razona un barón en conversación con este diario. «Son unos Presupuestos de la marca PP, que quedan para quien venga después», añaden fuentes de Génova, como eje claro de la estrategia a futuro. Es decir: con la legislatura encauzada, será más fácil el cambio de cromos en el Consell. Siempre que Vox transija, claro. Los barones instan a marcar una hoja de ruta, a clarificar el futuro de Mazón antes del congreso del PP, para no «entorpecer» el cónclave.
Alberto Núñez Feijóo aún no ha decidido cuándo invocar (o forzar) la salida de Mazón. Según ha sabido este diario, el presidente del PP mantuvo una conversación con el barón alicantino en la que estableció el plazo preliminar de 2025. Todo este año se destinaría, en principio, a centrar los esfuerzos en la «reconstrucción» de las zonas afectadas por las riadas de la dana del 29 de octubre. Y en 2026 se analizaría si los réditos políticos de esa labor han sido suficientes «con las encuestas en la mano», dicen en el equipo de Mazón.
Después de esa conversación, Feijóo y Mazón se encontraron en la Junta Directiva Nacional del PP de la semana pasada, en la que el líder de la oposición le preguntó cómo iba la reconstrucción y le dijo «que había que seguir» en esa clave, según las fuentes. Es decir, Feijóo mantiene el margen de este año, en principio. Pero hay dirigentes de Génova que apuntan al verano como fecha ideal para el adiós de Mazón, y diferentes barones consultados por este diario inciden en que Feijóo se quitaría una gran losa de encima si ya tiene planteada (e incluso verbalizada) la solución antes del congreso del PP de julio.
«Vox quiere humillar al PP, y ya ha humillado a Mazón», expone uno de los principales barones populares, en relación a que, a cambio de aprobar sus Presupuestos, Vox hizo que el presidente valenciano apoyara desde un atril dos de los postulados basilares de la formación de Santiago Abascal: inmigración y ecología. «Mazón no puede seguir, y ahora que ya tiene Presupuestos es el momento de ponerse a hablar de eso», añade otro presidente a este diario.
«Está carbonizado y el PP valenciano lo sabe. Pero hay que medir los tiempos. Lo que no puede ser es que los problemas de Mazón eclipsen o entorpezcan el congreso», agrega. No tanto porque los problemas vayan a contaminar el debate ideológico de los populares, sino porque la imagen de renovación de fuerzas o «rearme moral», como la llaman en Génova, no sería completa si no hay ni un solo movimiento que ponga fecha al adiós del barón alicantino.
En la cúpula del Govern valenciano rechazan que el futuro de Mazón dependa del congreso del rearme del PP. Ni siquiera de las cuentas regionales. «La aprobación de Presupuestos no significa que Mazón se aparte». Es un tema de «estabilidad de la legislatura», no de liderazgo, inciden en su entorno. «Igual dijeron con las Fallas o con el Congreso del PPE», pero «ninguno de estos temas está relacionado con su continuidad, tampoco el congreso nacional», añaden.
«Otra cosa es la candidatura de 2027», reconocen en el equipo del presidente autonómico. «Tras el congreso nacional del PP tocan los congresos regionales y entonces se hablará», reconocen. Y ahí es donde entra en juego la ponencia estatutaria que preparará el PP para su «cónclave» de inicios de julio. Según fuentes conocedoras de los primeros contactos, no se va a cambiar el artículo 31 de las normas internas de los populares, que es clave para determinar una salida exprés de Mazón.
¿Por qué? ¿Qué dice ese artículo? El punto 2, que el PP prevé mantener tal cual, señala lo siguiente: «La convocatoria de los congresos autonómicos, provinciales o insulares deberá efectuarse dentro de los cuatro meses siguientes a la celebración del congreso nacional, salvo cuando el Comité Ejecutivo Nacional dispusiera en su caso lo contrario en razón de los intereses generales del partido». En el caso del PP de la Comunidad Valenciana, esto no sólo abre una ventana para justificar un congreso en septiembre u octubre, sino que, además, permitiría a Génova enmarcarlo en la renovación de más estructuras orgánicas. Está previsto que en otoño se celebre también, entre otros, el congreso del PP de Andalucía, que ya tocaba por fechas como el valenciano (han pasado cuatro años desde el anterior). Y queda otra patata caliente, que es el congreso catalán.
Cuando se convoque el congreso, Mazón deberá empezar a despedirse, a juicio de los dirigentes consultados. «Hay que sentarse a hablar de eso y luego iniciar un proceso de maduración hacia eso. No vas a crear un cisma porque sí, hay que hablar con la dirección de aquí», explican en el Consell. En este escenario estaría encima de la mesa que Mazón participase en la designación de su sucesor. «Pero no se ha llamado a ningún presidente provincial ni alcalde importante para esto aún desde Génova», acotan las fuentes. «No ha habido un viraje hacia esa posición en ningún momento, aunque los medios digan que Mazón es el talón de Aquiles de Feijóo», rematan.
La vicesecretaria del PP Ester Muñoz no ha despejado esta sensación. Preguntada en La Sexta si cree que Mazón es el mejor presidente posible de los valencianos, dijo que su opinión «es poco importante» y añadió que «la prioridad» tiene que se la reconstrucción tras la dana, en la que fallecieron 228 personas.