Abascal se ve como "alternativa" y rechaza ser "muleta" de Feijóo: "Están esperando a que caiga la fruta madura, y va a caer podrida por su responsabilidad" - España
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Abascal se ve como «alternativa» y rechaza ser «muleta» de Feijóo: «Están esperando a que caiga la fruta madura, y va a caer podrida por su responsabilidad»

Publicado: junio 29, 2025, 2:07 pm

Santiago Abascal eligió este fin de semana para celebrar su Asamblea General, una cita anual en la que los dirigentes del partido hacen balance del curso político de cara a sus afiliados. La fecha no es baladí: a una semana del congreso del PP, Abascal quería reivindicarse como la «alternativa» al Gobierno y presionar a Alberto Núñez Feijóo para elevar el tono -y las acciones- de su oposición a Pedro Sánchez. Y, así, a los populares ha ido dirigido el grueso de su discurso: «Están esperando a que caiga la fruta madura, y va a caer podrida por su responsabilidad».

«El problema no es solo Sánchez», ha enunciado Abascal al comienzo de su discurso en el Auditorio Mutua de Madrid, donde 600 personas -la mayoría, cargos del partido- han respondido por igual a las arengas del líder de Vox contra el Gobierno y el PP. «El problema es el sistema que ha hecho posible a Sánchez, el problema es el sistema del bipartidismo», ha proseguido Abascal, que ha llamado a sus compañeros de formación a «derrotar» a los «responsables por acción y por omisión» de que los socialistas sigan en La Moncloa pese a los casos de corrupción que les rodean. «El problema es la estafa del PP; lo decimos con tanta pena como claridad».

El presidente de Vox ha cerrado el acto en el que sus portavoces en materia económica y de vivienda, José María Figaredo y Carlos Hernández Quero, han expuesto el nuevo programa económico del partido. Para Abascal, este ideario y las propuestas que contiene reflejan que Vox «es la única [formación] que plantea un cambio de rumbo»: «Otros tienen mucha prisa […], pero no ambicionan cambiar nada», ha denunciado, en otro dardo dirigido a los populares.

En este sentido, el líder de Vox, arropado por los suyos y haciendo balance del curso político, ha lamentado que se le pregunte por posibles acercamientos o pactos con el PP para el futuro. «¿Queremos una alternativa, pero qué vamos a pactar?», ha cuestionado, reprochando también a los populares que engorden la tesis de que Vox debe respaldarles. «¿Hasta qué punto el PP ha confundido a sus propios electores que piensan que tienen algún tipo de derecho de pernada sobre nosotros?»

«Vox no está para ser la muleta de nadie», ha reivindicado Abascal, que ha planteado este acto como el impulso para relanzarse de cara al nuevo ciclo electoral. «Vamos a ganar las elecciones, a ser posible con mayoría absoluta», ha asegurado, aunque, consciente de sus posibilidades actuales, se ha dicho «dispuesto a pactar con otros para ofrecer algo mejor a España». Ha sido el único guiño que ha hecho a Feijóo, aunque los aplausos de los asistentes no han permitido escucharlo con nitidez.

Abascal también ha dejado hueco en su discurso para entonar las habituales críticas y acusaciones a Sánchez y su Gobierno. El líder de Vox ha denunciado que el presidente ha llevado al país «al aislamiento en materia internacional», refiriéndose a lo ocurrido en la cumbre de la OTAN con la oposición de Sánchez a elevar más el gasto en defensa. Y, pese a considerar al Ejecutivo rodeado por la corrupción, Abascal no ha aventurado elecciones tempranas: «Sánchez e va a agarrar al poder con uñas y dientes. Va a hacer lo que sea para protegerse de las investigaciones, de una probable imputación».

Cumbre internacional en septiembre

El acto de este domingo no solo ha servido de punto y final al curso político, sino también de avanzadilla de lo que Vox planteará a partir de septiembre. El partido, que este año ha situado su estrategia internacional en el centro de sus planes, quiere que esta siga siendo su principal apuesta y abrirá el nuevo curso con una cumbre en España con sus «socios» extranjeros. La francesa Marine Le Pen, el húngaro Viktor Orban e incluso el argentino Javier Milei tendrán seguro invitación a la cumbre que prepara Vox para el 13 y 14 de septiembre.

El acto celebrado esta mañana ha puesto fin a la Asamblea General Ordinaria de Vox, que por Estatutos debe celebrarse una vez al año. En esta ocasión, dado que Abascal fue reelegido presidente del partido en enero de 2024 -le restan dos años y medio de mandato-, el órgano de representación de los afiliados solo debía aprobar las cuentas relativas al ejercicio pasado. Así lo ha hecho: el 97,65% de los militantes ha avalado la gestión financiera del partido. Los afiliados han dado así su visto bueno al préstamo de siete millones de euros que Vox solicitó al banco vinculado con Viktor Orban -el año anterior ya pidió otro de 6,5 millones- y a la aportación de dos millones de euros que el partido destinó a su fundación, Disenso.

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