Publicado: agosto 14, 2025, 4:07 pm

Dos hidroaviones franceses refuerzan desde este jueves los medios estatales, autonómicos, locales y provinciales desplegados en Galicia para atajar la ola de incendios forestales. El fuego mantiene a la comunidad, como a buena parte de España, en alerta; ha arrasado ya más de 22.000 hectáreas de terreno forestal; y desde el lunes obliga a cortes intermitentes de la comunicación ferroviaria y por carretera con la Meseta.
Las aeronaves llegaron al aeródromo militar de Lavacolla, en Santiago de Compostela, en respuesta a la petición realizada por el Ministerio del Interior al Mecanismo Europeo de Protección Civil. A la hora a la que aterrizaban había siete grandes incendios activos en la provincia de Ourense y otros diez estabilizados o controlados por toda la comunidad, según la información facilitada por la Xunta de Galicia.
Por estos fuegos, en la mañana de este jueves permanecen confinados cuatro núcleos de población en Monterrei (Ourense), algunos de los cuales tuvieron que ser evacuados durante la noche por seguridad para facilitar las labores de control de la cabeza del incendio, y tuvieron que ser desalojados y trasladados a otros centros 73 mayores con movilidad reducida de residencias de las localidades de Chandrexa de Queixa y A Mezquita.
La situación más crítica se vive en Ourense, donde está decretada la Situación 2 en toda la provincia, una decisión que implica una mayor agilidad de medios y recursos de extinción y ampliación del horario laboral del personal. En Chandrexa de Queixa, dos incendios diferentes ya han arrasado más de 9.500 hectáreas, en Maceda van 1.700 de la parroquia de Santiso; en Oímbra y Monterrei la superficie afectada es de 5.000; y en A Mezquita, 4.000.
El delegado del Gobierno en Galicia, Pedro Blanco, se desplazó a Lavacolla para recibir a los dos hidroaviones. Acompañado por el jefe accidental de este aeródromo militar, el teniente Coronel Juan José Vázquez, agradeció a las tripulaciones a colaboración de la Unión Europea y del Gobierno francés, «muestra de la importancia de la solidaridad y de la cooperación internacional en un momento tan difícil para nuestro territorio».
Se trata de dos aeronaves tipo Canadier, similares en prestaciones a las que operan en España. Tienen una capacidad de más de 5.000 litros de agua, de tal forma que se eleva su efectividad sobre el terreno.
El delegado del Gobierno insistió en el compromiso del Gobierno en la respuesta ante esta emergencia «con todos los medios, que llevan días trabajando sin descanso, en coordinación con los equipos de la Xunta y los ayuntamientos».
Avanzó, igualmente, que «no vamos a parar» hasta frenar y apagar cada uno de los incendios que amenazan la comunidad, con el compromiso de «proteger a las personas, preservar el territorio y devolver la tranquilidad a las zonas afectadas».