Publicado: abril 16, 2025, 2:07 pm
El ministro Félix Bolaños se ha desvinculado este miércoles ante el juez de la contratación de una asesora en La Moncloa para asistir a Begoña Gómez, esposa del presidente del Gobierno, aunque ha respaldado la legalidad de esa decisión, según indican fuentes conocedoras de la declaración.
El ministro de Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes ha sido interrogado como testigo por el magistrado Juan Carlos Peinado en el Palacio de La Moncloa sobre el nombramiento de Cristina Álvarez. Su cargo oficial es el de directora de Programas de la Secretaría General de Presidencia del Gobierno, si bien en su propia declaración ante Peinado indicó que su tarea era asistir de múltiples formas a la esposa de Pedro Sánchez.
Bolaños ha declarado que no tuvo nada que ver con ese nombramiento, que no era de su «competencia». No conocía a Álvarez y no recuerda su designación, ha añadido, resaltando que son cientos los nombramientos y ceses que se producen. Pese a ello, ha asegurado al instructor que el nombramiento se hizo «conforme dice la ley» con el personal eventual, con «todos» los tramites reglamentarios.
El ministro ha subrayado que la figura del asistente del presidente del Gobierno ha existido «con todas» las mujeres de presidentes anteriores y que Begoña Gómez solo tenía una, mientras que otras han contado con más de un asistente.
Como ministro, Bolaños tenía el privilegio de declarar en su despacho, pero como testigo estaba obligado a responder a todas las preguntas que se le formularan. La declaración ha durado más de dos horas, en parte porque el juez le ha dado media hora para que hiciera las llamadas necesarias para determinar quién era el superior de la asesora, dado que el ministro no podía precisarlo.
Bolaños ha recordado al instructor que disponía en la causa de un certificado que indica que quién es el responsable de coordinación del personal del palacio de la Moncloa. Se trata de Raúl Díaz Silva, que fue quien informó al juzgado 41 de Madrid que «la empleada pública de Presidencia de Gobierno, Dña. María Cristina Álvarez Rodríguez, desempeña tareas de colaboración inmediata, de carácter logístico y organizativo en el marco de la atención a la esposa del Presidente del Gobierno, en las que predominan las notas de afinidad inherentes a la confianza».
El nombre de Cristina Álvarez surgió en la investigación porque formaba parte de las cadenas de correos cruzados con Begoña Gómez con la Universidad Complutense con motivo de su cátedra de Transformación Digital. Tras conocer las circunstancias de su contratación y sus tareas reales, el juez instructor acordó abrir una pieza separada para investigar un posible delito de malversación de caudales públicos. Dentro de esa pieza acordó tomar declaración al ministro.
Llegada en coche oficial
Peinado citó a Bolaños después de que tomara declaración como testigo a Alfredo González, que en julio de 2018, momento de la contratación de Álvarez, era vicesecretario general de la Presidencia. El testigo indicó que su superior era Bolaños, con el que precisó que se reunía a diario para multitud de asuntos. Antes de ser designado ministro en 2021, Bolaños era secretario general de Presidencia del Gobierno
Fue González quien tramitó el nombramiento, aunque indicó que no conocía a la asesora y que no recordaba quién le había indicado que debía ser ella. «Me limitaba a remitir al órgano competente para el nombramiento las propuestas de personal eventual. Al tratarse de personal eventual el nombramiento y el cese es libre», declaró.
El juez mostró su sorpresa, según refleja el acta de la declaración: «Perdone que insista tanto, pero es que llama poderosamente la atención a quienes tenemos algún tipo de vinculación con la Administración Pública. Esto no es lo habitual, sino todo lo contrario, se exigen unos procesos bastante rígidos y bastante selectivos para nombrar a alguien que va a percibir cantidades con cargo a los presupuestos generales del Estado. Entonces, insisto, ¿usted hace esta propuesta sin conocer a nadie, con todos estos detalles?».
El testigo le indicó que para caso de personal eventual como el de la asesora esos requisitos que indicaba el juez «no operan».
La declaración de Bolaños se ha producido finalmente en La Moncloa tras un tira y afloja entre el juez y el ministro. Tras rechazar la petición de que practicar la diligencia por escrito, la intención inicial de Peinado era interrogarle en el despacho del Ministerio de Justicia. Bolaños alegó problemas de seguridad para proponer mejor el de La Moncloa. La respuesta del juez fue que cuando el verano pasado fue al complejo presidencial a interrogar a Pedro Sánchez se le hizo esperar demasiado. Bolaños ofreció entonces enviarle un coche oficial, algo que aligeraría los trámites de seguridad. Así ha sucedido, con una precisión de último minuto: el juez ha impedido que un policía les acompañara en el vehículo oficial a La Moncloa.
