Publicado: marzo 23, 2025, 3:07 pm

Dolores Vázquez, condenada injustamente por el asesinato de Rocío Wanninkhof en 1999, ha sido homenajeada este domingo por el Ayuntamiento de Betanzos con el XVII premio Úrsula Meléndez de Texeda, según informa Europa Press. En declaraciones a los medios al finalizar el acto de entrega, Vázquez ha destacado que recibe con «muchísimo cariño y muchísimo respeto» este galardón, aunque también ha hecho hincapié en que «necesita que el Gobierno le pida perdón».
«En mi corazón, necesito que el Gobierno me pida perdón, este es mi pueblo y no es lo mismo, es mi gente, la que lleva siete años conviviendo conmigo y me conoce. Lo de hoy es especial y sé que no voy a tener otra oportunidad así, pero no es suficiente», ha reivindicado.
Cabe recordar que en septiembre del año 2000, Dolores Vázquez fue detenida como principal sospechosa del asesinato de Rocío Wanninkhof, hija de su expareja. Sin embargo, fue absuelta de los cargos tras la aparición de pruebas que condenaron por el asesinato de la joven a Tony Alexander King, después de que el ciudadano británico fuera detenido por abusar sexualmente y asesinar a la joven Sonia Carabantes en agosto de 2003.
Sin embargo, Vázquez ya había sido condenada y encarcelada, de hecho, llegó a estar 17 meses en prisión, además de haber sido víctima de un intenso juicio mediático tras el que decidió mudarse a Reino Unido y sin haber sido indemnizada. En la actualidad, Dolores Vázquez vive en Betanzos, ciudad coruñesa en la que nació y que 25 años después le ha rendido homenaje.
Así, a propuesta del grupo municipal socialista, se aprobó por unanimidad (PSOE, PP, BNG y no adscritos) otorgar este reconocimiento a la betanceira, con el que el Ayuntamiento destaca cada año la figura de la mujer dentro de los actos conmemorativos del 8 de marzo.
«NO GUARDO RENCOR A NADIE»
En un auditorio a rebosar, de hecho, la gran afluencia ha obligado a los asistentes a moverse de sala, la alcaldesa de Betanzos, María Barral, le ha pedido perdón a Dolores Vázquez por ser víctima de una sociedad «terriblemente injusta».
Pero también ha señalado a unos poderes del Estado «que no estuvieron a su lado y que siguen sin estar a la altura», además, se ha disculpado «por cada mirada injusta, por cada duda, por cada condena personal y global, por cada codazo y por cada gesto de abandono».
«Es un día especial porque estamos aquí para hacer algo que deberíamos haber hecho hace mucho tiempo, reconocer, honrar y, sobre todo, pedir perdón a una mujer que sufrió una de las mayores injusticias de nuestra historia reciente. Fuiste víctima de una sociedad que en lugar de protegerte te señaló, de un sistema que en lugar de ampararte te condenó sin pruebas, sin razones y sin humanidad», ha subrayado la regidora.
Visiblemente emocionada y entre aplausos de un público en pie, la betanceira ha reconocido que lloró cuando recibió la noticia de que iba a ser homenajeada por el Ayuntamiento de su ciudad natal, una ciudad en la que ha asegurado sentirse «incluida, libre y querida».
En esta línea, ha reconocido que «no esperaba ver tantísima gente» en el acto de entrega de un premio que espera que pueda ser una oportunidad para que otras zonas de España decidan «reconocer el error» y ha resaltado que ella «siempre estará abierta».
«No guardo rencor a nadie, a nadie, porque el sentirse mal, el no querer, el no ser coherente con uno mismo, lo único que se consigue así es amargarse uno por dentro. Y eso jamás, siempre iré hacia adelante y lo que me den, bien recibido estará», ha concluido Dolores Vázquez.