Publicado: marzo 6, 2025, 7:07 pm
El Gobierno ya no se cierra totalmente a llegar al 2% del Producto Interior Bruto (PIB) de inversión en Defensa en 2029. Hasta ahora, los miembros del Ejecutivo no se movían ni una coma de ese argumento, lo repetían una y otra vez desde el propio presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, hasta el ministro de Asuntos Exteriores o el de Economía. Pero la situación ha cambiado. Fuentes gubernamentales reconocen que se contempla el escenario de poder llegar a ese objetivo antes de 2029 y que se están haciendo esfuerzos para eso. Ese 2% es la cifra de inversión que tanto en Bruselas como en el seno de la OTAN ya se ha quedado totalmente desfasado.
La presión sobre el Gobierno ha sido notable en las últimas semanas. Desde la Comisión Europea, tanto con la presentación del plan Rearmar Europa como con alusiones directas a España, y también desde la Organización del Tratado del Atlántico Norte diciendo que los países que están por debajo del 2% deben hacer mucho más. Y el punto de partida de Sánchez ya es diferente.
Este jueves se reúnen en Bruselas los líderes europeos en una cumbre excepcional en la que uno de los puntos clave es esa inversión militar, y en este foro el tono mostrado ya es sustancialmente diferente. España está dispuesta a acelerar en esa senda marcada hasta 2029 pero en función de muchos factores, matizan desde el Ejecutivo, como las prioridades de la OTAN o las herramientas que se han puesto en marcha.
El ministro de Exteriores, José Manuel Albares, ha incidido en esta misma este jueves en un foro de La Vanguardia, donde ha expuesto que 2029 «es el compromiso oficial, pero el Gobierno está dando pasos rápidos al respecto».
El plan Rearmar Europa que anunció el martes Ursula von der Leyen contempla una movilización total de hasta 800.000 millones de euros en Defensa que, como casi siempre en este tipo de actuaciones, se trata de una cifra máxima difícilmente alcanzable. De hecho, la propia Comisión así lo reconoce. Pero sí es una muestra de la ambición y de las exigencias de la presidenta del ejecutivo comunitario, quien además pone la mayor parte del esfuerzo requerido sobre los países.
Von der Leyen partió de la base de que los países miembro aumentarán su gasto anual para Defensa en un 1,5% de su Producto Interior Bruto (PIB), lo que en el caso de España son en torno a esos 25.000 millones de euros.
El Gobierno ya despliega un ejercicio de pedagogía ante un asunto que necesita de predicamento entre la sociedad y sobre el que necesita aunar unos apoyos en el Congreso que ahora mismo no tiene.
Acelerar o elevar el gasto militar es un asunto complejo para el Gobierno. Para empezar, porque no hay certezas de que pueda aprobar unos nuevos Presupuestos, que son la herramientas para canalizar ese mayor desembolso.
Y, en segundo lugar, porque los socios de Sánchez no comulgan con esa posición. Empezando por el propio socio de coalición, Sumar, y siguiendo por los socios de gobernabilidad como son Podemos, ERC, Bildu o el BNG.
De ahí que el presidente del Gobierno haya anunciado este jueves que la próxima semana se reunirá con todos los grupos parlamentarios, excepto con Vox, para exponerles la visión de la situación y las conversaciones que se están teniendo en las diferentes reuniones de líderes que se están produciendo. Porque ante la posición contraria de sus socios, un incremento del gasto en Defensa tendría que pasar por contar con los votos del PP.
Desde el Partido Popular, sin embargo, se han mostrado también este jueves y también desde Bruselas muy reticentes a ofrecer su apoyo. El presidente popular, Alberto Núñez Feijóo, se ha desplazado a la capital comunitaria para reunirse con el canciller electo, Friedrich Merz, y con el presidente del PP Europeo, Manfred Weber. Y al ser preguntado por la intención de Sánchez de reunirse con todos los grupos parlamentarios a excepción de Vox, ha criticado que el presidente del Gobierno no haya explicado en el Congreso cuáles son sus intenciones en materia militar.
«No sé exactamente de qué nos quiere informar el presidente. De lo que nos tiene que informar es de cuál es el incremento previsto en el gasto en Defensa. Pero no después de que el Consejo [Europeo] lo acuerde, sino antes. Tiene que pedir permiso al Congreso para cualquier decisión de Defensa», ha respondido Feijóo. «Me sorprende que llame a todas las fuerzas políticas, salvo a la tercera. Me sorprende este apartheid que parece que el presidente quiere hacer», ha añadido.