Publicado: noviembre 4, 2025, 9:07 pm
La sucesión de Carlos Mazón al frente de la Generalitat sigue cociéndose en el PP valenciano con tres nombres sobre la mesa con opciones que van fluctuando y que, en buena parte, dependen de Vox. Eso sí, nadie alza la voz. La alcaldesa de Valencia, María José Catalá, aguarda un perfil bajo «con actitud prudente y discreta», mientras el presidente de la Diputación de Valencia, Vicent Mompó —el primer nombre que aireó el propio PPCV y al que puso freno Génova- asegura que no se ha «postulado» como relevo por si había una convocatoria electoral. La tercera vía, y la que cobra más fuerza, es el portavoz en las Cortes, Juanfran Pérez Llorca que, sin agenda pública, guarda silencio. Ninguno da un paso al frente, pero tampoco se retira.
A Catalá, el primer nombre en el que Génova pensó, le cogió la crisis en viaje oficial a Nueva York. Mientras Carlos Mazón ha sido presidente, y pese a las peticiones de dimisión constante en la calle desde hace un año, ella siempre ha mantenido que su intención era seguir siendo alcaldesa de Valencia. Este lunes, sin embargo, no ha sido tan tajante en público. «Creo que este proceso es lo suficientemente trascendente e importante en mi partido como para que yo mantenga una actitud muy respetuosa y, sobre todo, muy prudente al respecto», aseguró antes de mostrarse convencida de que la situación se va a resolver «de forma ágil». «Lo vamos a hacer bien y vamos a seguir gestionando esta comunidad, esta ciudad, las capitales de provincia y las tres diputaciones con máxima diligencia, centrados en la recuperación y, sobre todo, atendiendo a las personas», apuntó.
Como diputada en las Cortes, podría ser el relevo inmediato de Mazón y también cartel electoral en unos comicios, algo que no quiere visualizar. «No voy a pronunciarme. Creo que es momento de ser respetuosa y de ser prudente. Sabéis mi opinión respecto de esta situación, me la habéis preguntado en muchas ocasiones y siempre he respondido lo mismo. Pero, insisto, voy a mantener una actitud prudente, voy a tener una actitud discreta y a seguir trabajando en mi obligación. Me veo como hoy abriendo centros de mayores en la ciudad de Valencia con absoluta disciplina, lealtad y con absoluto respeto», insistió.
Catalá confirmó que habla con el presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, «con frecuencia» y evitó valorar al resto de candidatos que suenan. «Mi prudencia y mi respeto exigen que no me posicione respecto de estas posibilidades», repitió, volviendo a echar balones fuera.
La alcaldesa no quiso desvelar si conocía la intención del presidente Mazón de dimitir en los días previos y mostró su «absoluto respeto»: «He compartido mucho tiempo en un proyecto político y siempre mostraré respeto hacia sus decisiones y cariño personal». «El Partido Popular ha asumido, más concretamente Carlos Mazón ha asumido sus responsabilidades políticas y creo que ahora hay un tiempo en el que otros deben asumir las suyas», aseguró.
El presidente de la Diputación de Valencia, Vicent Mompó.EFE
Mientras Catalá inauguraba ese centro de mayores, el presidente de la Diputación, Vicent Mompó, inauguraba un taller patrocinado por la institución provincial para el fomento del uso del valenciano en el Hospital Clínico de Valencia. Si el pasado viernes salió de la reunión con los barones provinciales como el candidato a suceder a Mazón, sus opciones han perdido fuerza por el freno de Génova y la opción de acabar la legislatura invistiendo a un diputado. Eso le ha llevado a dar un paso atrás.
«En ningún momento ni me he postulado ni nada parecido. Estaré donde el partido me pida, pero estaré siempre defendiendo los intereses de los valencianos. Es lo que dije», aseguró antes de negarse a hablar del futuro.
El presidente provincial explicó que la reunión del pasado viernes de los barones fue una «reunión de análisis» para valorar la situación del partido en la que Mazón les «orientó más o menos lo que él pensaba o dejaba de pensar». Y aprovechó para lanzar un mensaje a la dirección nacional: «La última palabra la tiene Génova, pero escuchará lo que quieren los valencianos«. Eso sí, alabó a Pérez Llorca y a Catalá, «la mejor alcaldesa de España, y está muy a gusto siéndolo», matizó.
Lo que Mompó y Catalá tienen en común es que ambos se resisten a reconocer que la elección tendrá que pasar el filtro de Vox, porque son necesarios los votos. Para la alcaldesa, han sido socios leales, pero es decisión interna, y para el presidente provincial, «nadie puede decirnos lo que tenemos que hacer».


