Publicado: septiembre 8, 2025, 2:07 am
La fontanera del PSOE, Leire Díez, pidió personalmente a Koldo García que «no involucrara» a Santos Cerdán en la investigación que instruye el Tribunal Supremo y le reclamó información sensible que comprometiera a altos mandos de la Guardia Civil. Ambos mantuvieron varias reuniones a principios de este mismo año en Madrid en las que Díez pidió a Koldo, que llevaba casi un año investigado por el supuesto cobro de comisiones a cambio de los contratos de la pandemia, que no incriminase al entonces secretario de Organización socialista, que no abandonó su cargo hasta mucho después, ya en junio. La fontanera sondeó en reiteradas ocasiones a Koldo, ex asesor de José Luis Ábalos, para comprobar qué información disponía de una quincena de miembros de la formación política y le llegó a sugerir varios letrados para que adoptara una nueva estrategia de defensa.
EL MUNDO ha tenido acceso a comunicaciones entre ambos en las que Díez, en enero de este año, le aleccionaba de esta forma a Koldo García a través de mensajes: «Muy importante. Que la mano derecha no sepa lo que hace la izquierda. Y muy poco teléfono». Incidiéndole en todo momento en que no dejaran rastro de las conversaciones que mantenían y que no quedara constancia de las peticiones que le trasladaba en sus encuentros. Asimismo, la fontanera le emplazaba a que quedaran continuamente porque tenían «mucho que ordenar» en referencia a la información que le iba solicitando.
La ex militante socialista se puso en contacto por primera vez con el ex asesor personal de José Luis Ábalos poco antes de las Navidades del pasado año a través de Whatsapp. Se presentó diciéndole que era afiliada, que había ocupado diferentes cargos públicos y que tenía mucho interés en conocerle personalmente. Según ha podido saber este periódico, Koldo le devolvió la llamada, mantuvieron una primera conversación telefónica y aceptó mantener un primer encuentro en Madrid, que se celebró en la marisquería La Chalana. A esa primera toma de contacto le siguieron al menos otras tres citas más en las que Leire Díez le espetó en varias ocasiones: «No te metas con Santos ni le involucres».
De manera paralela a esta petición de protección para quien era la mano derecha del presidente del Gobierno, le preguntó por numerosos miembros destacados del PSOE, reclamándole la información comprometedora que tuviera de ellos y le insistió en que estaba muy interesada en cuestiones que pudieran incriminar a la cúpula de la Guardia Civil. «Después de lo que te han hecho, destrózalos», le llegó a decir a Koldo García, que fue detenido por la UCO mediante un espectacular despliegue policial. El ex asesor ministerial se limitó a escuchar y a repetir una frase que ha empleado habitualmente en las entrevistas que ha concedido para eludir entrar en determinadas cuestiones: «Todo en su momento». Cabe recordar que Koldo García fue condecorado por el Instituto Armado con la Cruz de la Orden del Mérito con distintivo blanco en 2018 por sus servicios al Cuerpo durante los años de investigaciones contra ETA.
Díez se interesó concretamente por los servicios que había prestado Koldo García al Instituto Armado en el pasado y le comentó que tenía referencias de algunos de los trabajos que había realizado para los mandos de Información en el marco de la lucha antiterrorista. El ex colaborador de Ábalos se negó en este punto a facilitar detalles concretos y al sospechar del planteamiento que le hacía su interlocutora, le reclamó en varias ocasiones: «Qué coño quieres mí». Acabó rompiendo el contacto de forma brusca en la última de las reuniones que mantuvieron siempre en Madrid.
Captura de pantalla de una de las conversaciones entre Koldo García y Leire Díez
La aparición en escena de Díez tuvo lugar meses después de que Koldo García trasladara, tras su detención en febrero de 2024, media docena de mensajes a la dirección del PSOE en los que solicitó poder hablar con un interlocutor válido dentro del partido. Quien fuera el hombre de máxima confianza de Ábalos hizo llegar a la cúpula socialista que no quería perjudicar «a más de 250 personas» que le habían pedido «favores» durante su etapa en el Ministerio de Transportes. Al mismo tiempo reclamó ayuda para que su familia pudiera subsistir económicamente tras su arresto. «Yo siempre he cumplido órdenes, he hecho lo que decíais, me he dedicado a solucionar problemas en el partido y ahora lo único que pido es sentido común», especificó. Estos mensajes los hizo llegar a través de Whatsapp y recurriendo a terceras personas después de que la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil le confiscara en su domicilio miles de grabaciones.
Los mensajes comenzaron, tal y como publicó este diario, a los tres meses de su detención por orden de la Audiencia Nacional, fueron reiterados a los seis meses y han continuado hasta fechas muy recientes, cuando Koldo subrayó que había tenido que ponerse a recoger aceitunas para poder mantener a su familia. Estos recados, en medio de los cuales irrumpe la figura de la fontanera de Ferraz, tienen incluso precedentes antes del estallido del caso Koldo. En una de las cintas intervenidas, que data del 12 de diciembre de 2023, le dijo directamente a Cerdán que había hecho llegar «un recado» a los directores de Gabinete de Sánchez al estar ya convencido de que iba a ser detenido: «Llegó a Óscar López, Antonio Hernando…».
Díez ha sido citada hoy en el Senado a petición del PP para que explique las maniobras que realizó al citarse con múltiples imputados en los casos judiciales que afectan al PSOE para ofrecerles protección a cambio de información contra fiscales, jueces y guardias civiles que tienen al partido contra las cuerdas. La fontanera tendrá que comparecer también el próximo mes de noviembre como investigada por cohecho y tráfico de influencias, esta vez ante el Juzgado de Instrucción número 9 de Madrid, para esclarecer las reuniones que mantuvo, entre otros, con el empresario del caso Hidrocarburos Alejandro Hamlyn, desvelada por El Confidencial, o las que tuvo con el comandante de la Guardia Civil investigado en el caso Koldo, Rubén Villalba, detalladas por EL MUNDO, donde también se interesó por datos sensibles de agentes de la Guardia Civil.
Leire Díez, a preguntas de este diario, justifica sus reuniones con investigados como Koldo en que estaba preparando un libro de investigación.