Publicado: septiembre 3, 2025, 2:45 pm
El pasado mes de junio Camilla Herrem (38 años) anunció que padecía cáncer de mama. Inmediatamente comenzó el tratamiento para combatir la enfermedad y el 26 de agosto acudió a la última sesión de quimioterapia. Como suele ocurrir en estos casos, ha perdido todo el pelo, una abundante melena rubia que, habitualmente recogida en una coleta, la ha acompañado en su exitosa carrera como jugadora de balonmano profesional . Camilla ocupa la demarcación de extremo izquierdo y es una figura histórica de la selección de su país, Noruega, una de las grandes potencias del balonmano femenino. Así, defendiendo el escudo nacional acumula un palmarés excepcional: dos oros olímpicos ( Londres 2012 y París 2024), tres títulos mundiales y seis campeonatos de Europa . El domingo 31 de agosto, cinco días después de la citada sesión de quimio, Herrem volvió a pisar el parqué de un pabellón. Con la camiseta amarilla y el pantalón negro del Sola HK , el club de la ciudad donde nació, saltó a la cancha jugó el partido correspondiente a la jornada inicial de la Primera división noruega… y marcó cuatro goles en la victoria ante el Oppsal (29-25). «Fue una oleada de emociones», reconoció Camilla tras un encuentro que, además de por su fortaleza física y de ánimo, fue muy especial por otras circunstancias: por jugar en el club de su vida, al que regresó en 2017 tras haber estado en las ligas de Rumanía (Baia Mare) y Macedonia del Norte (Vardar Skopje), y sobre todo porque el entrenador del Sola es Steffen Stegavik , su esposo y padre de los dos hijos de ambos (de 7 y 2 años). No es la primera muestra de pundonor de esta jugadora. Así, en 2023 también regresó a la pista menos de un mes después de haber dado a luz a su segundo hijo.