Publicado: septiembre 25, 2025, 1:23 pm
Aunque no te gusten las películas de acción, sabes que Bruce Willis una vez salvó a toda la humanidad de su destrucción haciendo explotar una bomba en las tripas de un asteroide ‘del tamaño de Texas’. Porque puede que tenga uno de los agujeros de guión más grandes de la historia del cine, pero Armageddon está entre las mejores películas de ciencia ficción jamás creada.
No sabemos si piensan lo mismo desde la NASA, pero la última propuesta de sus científicos parece que se ha inspirado en Harry Stamper y su equipo de perforadores.
La NASA estudia desviar un asteroide con una bomba nuclear
Pongamos un poco de contexto para entender por qué la agencia espacial estadounidense está valorando enviar armas nucleares al espacio.
En diciembre del año pasado, el observatorio ATLAS (ubicado en Chile) descubrió el asteroide 2024 YR4, una roca espacial entonces de dimensiones desconocidas que llenó páginas y páginas en los periódicos por la alerta que generaron la NASA y la Agencia Espacial Europea (ESA), que llegaron a elevar a más de un 3% su probabilidad de impacto contra la Tierra en 2032.
Poco a poco, conforme avanzaron las investigaciones, los expertos fueron reduciendo las posibilidades de que el 2024 YR4 chocara contra nosotros, algo, por otro lado, común en la rama de la Astronomía que se dedica a vigilar objetos cercanos a nuestro planeta: “Cuando se descubre un asteroide, las primeras observaciones permiten tener una primera trayectoria con un error grande”, reconocía en una entrevista para 20bits el coordinador del servicio de información de la Oficina de Defensa Planetaria de la ESA, el español Juan Luis Cano.
Tras semanas tensas con titulares apocalípticos en los medios de comunicación, la comunidad científica y las agencias espaciales determinaron que el asteroide 2024 YR4 ya no representaba un riesgo de impacto significativo, bajando la probabilidad al 0,001%.
Sin embargo, otro giro de guión volvió a dar protagonismo a esta roca del espacio exterior: según los cálculos posteriores, este asteroide de unos 55 metros tiene un 4% de posibilidades de chocar contra la Luna.
¿Por qué un impacto contra la Luna sería un problema?
A priori, que el asteroide 2024 YR4 impactara contra la Luna no parece tan preocupante como si lo hiciera contra la Tierra. Pero los investigadores avisan: ese choque podría levantar tal cantidad de regolito (el polvo y las rocas que cubren la superficie lunar) que aumentaría hasta 1.000 veces la presencia de micrometeoroides en la órbita baja terrestre.
¿Y eso qué significa? Que satélites, estaciones espaciales y hasta los futuros astronautas que trabajen fuera de la Tierra estarían mucho más expuestos a pequeñas rocas capaces de agujerear paneles solares, escudos protectores o trajes espaciales.
El dilema de la NASA: desviar o destruir
Ante esta amenaza, los científicos se han encontrado con un dilema. Desviar el asteroide de su trayectoria suena tentador, pero entraña un riesgo: si la masa y trayectoria del 2024 YR4 no se calculan con exactitud, una misión mal planificada podría empujarlo hacia la Tierra.
Por eso, el nuevo estudio propone otra vía más radical: fragmentarlo antes de que se acerque a la Luna. Y aquí entran en juego dos planes principales:
- Impactadores cinéticos: enviar una nave que choque contra el asteroide para romperlo.
- Detonación nuclear controlada: lanzar un cohete con una bomba nuclear y hacerlo estallar cerca del objeto.
La idea de usar armas nucleares en el espacio parece algo tan de locos como el filme de Michael Bay, pero esta vez hablamos de física real y cálculos serios.
Los investigadores señalan que habría margen de preparación: una misión nuclear podría lanzarse entre 2029 y 2031, mientras que un intento de fragmentación con naves tendría su ventana entre 2030 y 2032.
Eso sí, conviene recordar que hay un 96 % de probabilidades de que el asteroide simplemente pase de largo y no llegue a rozar la Luna. En otras palabras: lo más probable es que no ocurra nada. Pero si quieres puedes ir haciendo tu propia investigación de campo y volver a ver Armageddon, aunque solo sea para disfrutar el momento clímax con la banda sonora de la mano de Aerosmith.