Publicado: junio 22, 2025, 6:23 pm
Después de que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, confirmara este domingo haber llevado un ataque contra tres instalaciones nucleares clave de Irán, las reacciones a la nueva escalada de conflicto no se han hecho esperar. En el ámbito de la política nacional, sin ir más lejos, en medio de sus habituales enfrentamientos por los casos de corrupción que afectan al PSOE, tanto Gobierno como PP han coincidido esta vez en apelar a la fuerza de la diplomacia. Sumar y Podemos, en cambio, han condenado rotundamente el bombardeo estadounidense.
De esta forma, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha llegado a asegurar que «Oriente Medio está al borde del abismo» y que es «urgente» hacer un llamamiento a la contención y a la desescalada, así como a la diplomacia y al diálogo. Así se ha expresado en un mensaje a través de X, donde también ha señalado que «Irán no debe acceder nunca al arma nuclear», aunque también ha declarado que la estabilidad en la región «solo se logrará en una mesa de negociación, con pleno respeto del Derecho Internacional».
«Lamentamos la pérdida de vidas civiles en este conflicto», ha escrito también el jefe del Ejecutivo español, que ha abogado por «una solución diplomática que establezca un marco de paz y seguridad integral para todos». Antes de ello, en un comunicado del Ministerio de Asuntos Exteriores, el Gobierno de España ha trasladado de igual forma la urgencia del «cese de la violencia y la vuelta a las negociaciones», así como también ha hecho un llamamiento «a la contención y al respeto del derecho internacional». Asimismo, el Ejecutivo ha señalado que las Embajadas de España en Irán y en los países de la región se mantienen «plenamente operativas» para atender a los españoles ante cualquier eventualidad.
Por otro, el presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, ha subrayado que «la estabilidad de Oriente Medio es una prioridad irrenunciable» y ha llamado a la diplomacia para evitar «una escalada generalizada». «La situación sigue siendo volátil y debe evitarse una escalada generalizada. La diplomacia es la vía», ha afirmado este domingo el líder de la oposición en la red social X. También se ha pronunciado la vicesecretaria de Organización del PP, Carmen Fúnez, quien ha hecho, del mismo modo, un llamamiento a la diplomacia para garantizar la estabilidad en el enclave: «La vía debe ser la diplomática para garantizar la estabilidad en Oriente Medio».
Sumar y Podemos condenan el ataque
A diferencia de Gobierno y oposición, Sumar, socio de los socialistas en el ejecutivo de coalición, y Podemos, han condenado el ataque de Estados Unidos. Así, a través de un comunicado, Sumar ha condenado «sin ambages» el bombardeo contra instalaciones nucleares iraníes, una acción que considera un «crimen de guerra» porque supone una «violación flagrante de la Carta, de las resoluciones de las Naciones Unidas, así como del derecho humanitario y de la propia constitución estadounidense».
La ministra de Sanidad, Mónica García, de Sumar, he escrito en X que «el ataque de EE.UU. a Irán es una grave escalada que pone en riesgo la estabilidad global» y que «Europa debe estar a la altura defendiendo la paz y el derecho internacional frente a quienes creen que pueden actuar con total impunidad».
También la eurodiputada y número dos de Podemos, Irene Montero, ha condenado el ataque y ha exigido al presidente del Gobierno que impida el uso de cualquier base militar española para las operaciones de ataques «ilegales» de Estados Unidos y de Israel contra Irán, como el llevado a cabo esta madrugada. En declaraciones a los periodistas tras participar en una manifestación en defensa de la protección del lobo, Montero ha exigido también a Sánchez que «de forma inmediata» saque a España de la OTAN y qué practique un embargo total de armas «a los genocidas».
Estas reacciones se producen además a dos días de la cumbre de la OTAN en La Haya, en la que participará Sánchez en su momento político más delicado desde que accedió a la Presidencia del Gobierno por los casos de corrupción que afectan al PSOE, y con el debate de fondo sobre el incremento del gasto militar.
Israel celebra el ataque y la UE apuesta por el diálogo
En terreno internacional tampoco se han hecho esperar las diferentes reacciones de todo tipo de líderes mundiales. El primer de todos ellos ha sido el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, quien ha felicitado al presidente Trump por su «audaz decisión». «Trump y yo solemos decir: ‘La paz se logra con la fuerza» ha añadido al tiempo que ha afirmado que este ataque «cambiará la historia».
Por el contrario, el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, ha dicho sentirse «gravemente alarmado» y ha advertido que «no hay solución militar» que sustituya a la diplomacia. También el papa León XIV ha lamentado las «noticias alarmantes» de Oriente Medio y ha llamado a toda la comunidad internacional a frenar la guerra como «responsabilidad moral» antes de que se convierta en una «vorágine irreparable».
En suelo europeo, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, ha expresado en una publicación de X que Irán debe comprometerse «a una solución diplomática creíble» y que «la mesa de negociaciones es el único lugar para poner fin a esta crisis». Además, ha añadido que Irán «nunca debe adquirir la bomba nuclear» y que con las tensiones en Oriente Medio en un nuevo punto álgido, «la estabilidad debe ser la prioridad» y el respeto del Derecho Internacional «es fundamental». A su vez, la alta representante de la Unión Europea (UE) para Asuntos Exteriores, Kaja Kallas, ha pedido «a todas las partes» dar «un paso atrás» para evitar una nueva escalada bélica en Oriente Medio.
Entre los países de la UE, el canciller alemán, Friedrich Merz, ha instado a Irán a entablar inmediatamente negociaciones con Estados Unidos e Israel para encontrar una solución diplomática. En Francia, por su parte, su ministro francés de Asuntos Exteriores, Jean-Noël Barrot, ha exhortado a actuar «con contención» para evitar «cualquier escalada». El presidente del país, Emmanuel Macron, ha hablado además este domingo por teléfono con el presidente de Irán, Masud Pezeshkian, a quien ha emplazado a promover una reanudación de las «discusiones diplomáticas».
«Es el único camino que lleva a la paz y la seguridad de todos», ha señalado en redes sociales Macron, que ha aprovechado el contacto para pedir la liberación «inmediata» de dos franceses retenidos en cárceles de Irán.
Italia, que ha justificado el ataque estadounidense debido al «peligro» de la producción nuclear iraní, ha pedido también a las partes una desescalada. «Que Irán se siente en una mesa de negociaciones», ha reclamado el ministro de Exteriores, Antonio Tajani. La primera ministra italiana, Giorgia Meloni, ha abogado también por el diálogo y ha convocado este domingo de urgencia una reunión con ministros y responsables de los servicios de Inteligencia ante «el agravamiento de la crisis en Oriente Próximo». El país se ha ofrecido además de nuevo como sede de una potencial «reunión directa» entre Estados Unidos e Irán.
Al margen de la UE, el primer ministro del Reino Unido, Keir Starmer, ha dicho que Estados Unidos ha tomado «medidas» para «mitigar» el potencial desarrollo de un arma nuclear por parte del régimen iraní, país al que «no se le puede permitir desarrollar un arma nuclear». «Instamos a Irán a regresar a la mesa de negociaciones (con Estados Unidos) y alcanzar una solución diplomática», ha advertido Starmer.
En respuesta a ello, el ministro de Exteriores iraní, Abás Araqchí, ha recordado a la UE y al Reino Unido que su país no se ha levantado de la negociación, sino que son Israel y Estados Unidos, los que han «destruido» toda la diplomacia con sus ataques contra las instalaciones nucleares iraníes. Por otro lado, Australia y Nueva Zelanda han pedido asimismo diálogo y diplomacia para solventar la solución en Oriente Medio.
Condena de los países árabes, Rusia o China
Tras los hechos, varios países árabes, entre ellos Irak, Arabia Saudí, el Líbano, Omán y Catar, han condenado unánimemente el ataque, considerándolo una «grave amenaza» para la seguridad de Oriente Medio, y han defendido también contener la situación en canales diplomáticos tras rechazar las soluciones militares.
La organización islamista palestina Hamás, por su parte, ha considerado que los bombardeos son una «flagrante violación» del Derecho Internacional, de «escalada peligrosa» y «una amenaza directa a la paz y la seguridad internacionales». Por otro lado, el gobierno de los rebeldes hutíes yemeníes en Saná ha mostrado «pleno apoyo» a Irán y el compromiso de sus fuerzas armadas, «listas para atacar barcos y buques de guerra estadounidenses en el mar Rojo».
Desde Rusia, aliado de Teherán, también se ha condenado rotundamente el ataque estadounidense y se ha culpado al país norteamericano de haber comenzado «una peligrosa escalada, que podría socavar aún más la seguridad regional y mundial». «Trump, quien llegó como un presidente pacificador, ha iniciado una nueva guerra para Estados Unidos», ha escrito el vicepresidente del Consejo de Seguridad de Rusia, Dmitri Medvedev.
Ante este escenario, el presidente ruso, Vladimir Putin, se reunirá este lunes en Moscú con el ministro de Exteriores de Irán, Abbas Araqchi, tal y como ha confirmado este último desde Estambul. «Rusia es un amigo de Irán y disfrutamos de una relación estratégica. Siempre nos consultamos y coordinamos nuestras posiciones».
De igual forma, el Gobierno Chino ha condenado el bombardeo estadounidense y ha llamado «especialmente a Israel» a la contención inmediata. «China condena enérgicamente el ataque estadounidense contra Irán y su ataque a las instalaciones nucleares bajo la supervisión del Organismo Internacional de Energía Atómica», ha hecho saber el Ministerio de Exteriores chino en un comunicado. Para Pekín, así, el ataque «viola gravemente los propósitos y principios de la Carta de las Naciones Unidas y el Derecho Internacional y exacerba las tensiones en Oriente Medio».
Por último, en Latinoamérica, el Gobierno de México ha hecho un «llamado urgente por la paz». En Chile, su presidente, Gabriel Boric, ha condenado los bombardeos por considerarlos contrarios al Derecho Internacional Humanitario, y ha exigido el respeto de las normas que rigen los conflictos armados. También se ha pronunciado el Gobierno venezolano, que ha condenado la «agresión militar» y ha exigido asimismo el «cese inmediato de las hostilidades». Igualmente se ha manifestado el presidente de Bolivia, Luis Arce, ante los hechos, los cuáles ha considerado un «ataque arbitrario».