Publicado: junio 30, 2025, 3:23 am
Al final resulta que la guerra de Ucrania, que prometía ser breve y ya está en los tres años parece que tiene algo bueno, poco la verdad, para algunas trabajadoras africanas. Seguramente no muchas porque el Kremlin siempre regatea dar datos cuando proporciona noticias aunque sean positivas. Porque según parece fue el propio Putin en persona a quien se le ocurrió la idea y ya es sabido que lo que Putin ordena, se cumple. Bueno, sin enrollarme que luego el director del periódico me pone la bronca y ¡como se las gasta!
Pues resulta que sí, que algunos centenares más o menos han sido reclutadas para la guerra, bueno para la guerra pero no para disparar con ametralladoras. Su función, tampoco es que se conozcan detalles, pero si que ésta está lejos del frente. Bueno, de los frentes porque hay varios. La aportación la verdad que no cabe considerarla precisamente como una aportación a la paz. ¡Qué va!. El trabajo que les espera, esperamos que no sea en Siberia porque mandar al frio a las africanas, sería un atentado contra la salud.
Bueno pues, me estoy enrollando, ¡coño! ¿Cuándo aprender? El trabajo que las espera pasará por un cursillo de formación técnica. ¡Síiiii! Se trata ni más ni menos que ensamblar piezas. O lo que sea para montar drones, el artilugio con mil utilidades incluida la de atacar y asustar en una guerra. La cosa no tendría especial relevancia si no fuese porque esa previsión de los militares rusos no aporta muchas esperanzas de que la guerra termine pronto. Los malpensados, que a veces suelen tener razón -por fortuna no siempre-, pueden concluir así que el astuto Vladimir Putin no tiene entre sus intenciones decretar la ansiada paz.
