Publicado: agosto 15, 2025, 12:23 am
“¡Apaga la consola, que jugar tanto no es bueno!”. “Con tanto videojuego se te va a quedar el cerebro frito…”. ¿Te suena? Quizá lo has escuchado alguna vez, o incluso lo has dicho. Pero, ¿y si te dijéramos que algunos videojuegos pueden ser una herramienta educativa tan potente como un libro o una clase bien dada?
Este jueves tenemos un nuevo episodio de 20bits by ValPat, con Valeria Corrales y Patricia Heredia desmontando algunos de los prejuicios más comunes sobre el mundo gamer. Ellas demuestran que, usados con cabeza, los videojuegos pueden enseñar —y mucho—. ¿La clave? Elegir bien qué se juega, cómo se juega y, sobre todo, acompañar a quienes juegan.
Para ello, ValPat ha seleccionado cuatro videojuegos que combinan diversión y aprendizaje, cada uno con un enfoque diferente y habilidades específicas que se pueden entrenar mientras se juega.
Minecraft Education: creatividad, historia y programación en bloques
El primero de la lista es ‘Minecraft Education’, una versión educativa del popular juego de construcción que va mucho más allá de hacer casas con cubos. Con él es posible aprender sobre historia del arte, resolver problemas matemáticos, programar en bloques o incluso explorar el sistema solar.
Val y Pat destacan recursos creados por profesorado español como ‘El Mundo de Goya’, el del Teorema de Pitágoras o del sistema solar, todos disponibles en la comunidad de L3tcraft. Además, muchos de estos contenidos están alineados con el currículo escolar y son gratuitos.
“Yo empecé a programar con bloques en Minecraft cuando tenía 9 años”, explica Valeria. “Es ideal para iniciarse en la programación y trabajar en equipo”.
Roblox Studio: aprende a programar creando tu propio videojuego
El segundo juego es ‘Roblox Studio’, una plataforma que permite diseñar videojuegos desde cero utilizando el lenguaje de programación Lua. Aunque mucha gente conoce Roblox como un juego más, su herramienta de desarrollo esconde un enorme potencial educativo.
Desde crear un sencillo recorrido tipo parkour hasta desarrollar mecánicas complejas para juegos de aventuras o supervivencia, los jugadores aprenden lógica, diseño, depuración y resolución de problemas, todo mientras se divierten creando sus propios mundos.
Kerbal Space Program: física espacial y ensayo-error
El tercero en la lista es ‘Kerbal Space Program’, un juego en el que los jugadores asumen el rol de directores de una agencia espacial. Tienen que diseñar cohetes, calcular órbitas, realizar lanzamientos, controlar reentradas atmosféricas… y asumir que, a veces, las cosas no salen bien.
Se puede aprender sobre física, ingeniería aeroespacial y toma de decisiones en entornos complejos.
Este videojuego es ideal para introducir conceptos científicos y fomentar el pensamiento crítico desde una edad intermedia o incluso en secundaria.
Civilization VI: estrategia, historia y diplomacia
Por último, ‘Civilization VI’ propone un enfoque totalmente diferente: construir un imperio desde la Edad Antigua hasta el futuro, tomando decisiones que afectan a la ciencia, la cultura, la diplomacia o la economía.
Con este juego se puede trabajar historia, geografía política, gestión de recursos, estrategia y habilidades blandas como la anticipación o el liderazgo.
“No siempre ganas por la fuerza”, explica Patricia. “Puedes ganar por cultura, por ciencia o incluso por diplomacia. Y todo lo que aprendes en una partida es aplicable al mundo real”.
Jugar no es perder el tiempo (si sabes cómo)
El mensaje final de ValPat es claro: jugar no es malo, ni inútil, ni peligroso por sí mismo. Lo importante es elegir bien los juegos, entender su potencial y acompañar a quienes juegan.
“Muchos adultos aún piensan que los videojuegos no enseñan nada”, dicen ValPat. “Pero la realidad es que pueden mejorar la creatividad, la empatía, el pensamiento lógico o la motivación por aprender”.
“Lo importante no es prohibir, sino entender a qué están jugando y qué están aprendiendo con ello”, concluyen.
Así que si buscas una forma diferente de motivar a tus hijos o alumnos a aprender, este episodio puede ser un buen punto de partida. Y si conoces más videojuegos con valor educativo, ValPat te invita a compartirlos en los comentarios. Porque aprender jugando no solo es posible… es el futuro.