Publicado: julio 18, 2025, 10:33 am
España era la encargada de acoger la Convención Europea de la Asociación Mundial de Boxeo (WBA por sus siglas en inglés). Después de varios días en los que se homenajeó el boxeo español , el colofón final llegó con el combate entre Moussa Gholam y Maximiliano Verón, donde el marroquí, residente en Barcelona defendió con maestría su su cinturón Continental América Gold del peso superpluma (58, 97 kilos). Numerosas personalidades no se quisieron perder la velada organizada en el Teatro Las Vegas, tales como el futbolista del Paris Saint-Germain Achraf Hakimi , quien acompañó a Gholam en su salida al cuadrilátero. Por supuesto, también acudieron al evento grandes nombres del panorama boxístico, como Gilberto Mendoza, presidente de la WBA, Alfredo Evangelista, Jon Fernández o Jennifer Miranda , recién aterrizada de pelear en el Madison Square Garden por un título indiscutido. Con estos espectadores de primer nivel, el combate estelar no podía ser menos. Gholam partía como favorito, teniendo a gran parte del público de su lado. Después de tres combates amateur y otras peleas profesionales con cinturones de por medio, llegaba el turno de poner el broche de oro a la noche. Moussa Gholam empezó decidido, tomando el centro y presionando hacia delante. Fue castigando con el jab y amenazando con la derecha. Por su parte, Verón no se amedrentó, y en la distancia corta trataba de que sus manos penetraran la férrea defensa del marroquí. Hacia el final de este primer asalto, el campeón comenzó a tocar el cuerpo, algo que sería clave en el transcurso del pleito. Para el segundo ya se podía intuir como acabaría el choque. Un certero uno-dos entró de lleno en el rostro de Verón , el cual se tambaleó. Moussa no perdió la oportunidad y continuó con el castigo, hasta que no dejó opción a su rival más que hincar la rodilla. Este sacó la garra y se puso de pie, pero el round estaba decidido. Gholam no se precipitó y empezó a cambiar alturas con maestría a la par que basculaba los golpes de Verón y respondía con el gancho de izquierda. En el tercero, Verón inició valiente, parecía decidido a remontar una pelea que se le escapaba. En la corta distancia pudo conectar alguna mano, mostrando peligro. No obstante, con el pasar de los segundos regresó el dominio del campeón. Tanto la zona hepática como el rostro del argentino eran la diana de un tirador experto . El uno-dos, seguido del gancho de izquierda se convertían en la principal arma de Gholam. Seguía la acción al cuarto asalto y Verón continuaba sin alternativas ante el boxeo de Moussa, el cual implementó los ‘uppercuts’ en la proximidad para cerrar que el asalto con un directo de derecha que dobló el cuello a su rival. Se acercaba el final, y el público lo sabía . Para el quinto asalto, a priori la mitad del combate, las manos de Gholam empezaban a llegar con más claridad. Maximiliano Verón aguantaba con gran corazón, pero el cansancio y el dolor empezaban a hacer mella. Por cuarte vez en la pelea dejó caer su bucal, por lo que el árbitro le restó un punto. En el final parecía que podría acabarlo, pero el argentino resistió de nuevo. Y aunque en el sexto asalto parecía que iba a ser más calmado, centrado en recuperar energía, Gholam conectó dos derechas demoledoras, prácticamente seguidas que obligaron a que el árbitro detuviera lo que se estaba convirtiendo en una carnicería . Con esta contundente victoria, Moussa Gholam retuvo su cinturón Continental América Gold del peso superpluma y se certifica como una de las grandes promesas del país.