Publicado: mayo 22, 2025, 3:57 pm
Moody’s Ratings ha mejorado la calificación de familia corporativa (CFR) de Grifols de ‘B3’ a ‘B2’ y la de probabilidad de incumplimiento (PDR) de ‘B3’ a ‘B2-PD’, al tiempo que la perspectiva se mantiene ‘ positiva ‘. En consecuencia, la agencia estadounidense ha mejorado la calificación de los instrumentos sénior garantizados con respaldo emitidos por Grifols , Grifols World Wide Operations Ltd. y Grifols World Wide Operations USA, Inc. a ‘B1’. Simultáneamente, ha mejorado la calificación de los instrumentos sénior no garantizados con respaldo emitidos por Grifols Escrow Issuer, SAU a ‘Caa1’ desde ‘Caa2’. Moody’s ha señalado que la mejora de calificación desde ‘B3’ a ‘B2’ refleja el robusto desempeño operativo de Grifols, con un «sólido» crecimiento de los ingresos y la rentabilidad y una «mejor gestión», lo que ha llevado a una mejora de sus indicadores crediticios clave. «Prevemos que el apalancamiento bruto ajustado de la compañía se situará por debajo de 6,5 veces para finales de 2025, desde 7 veces durante los últimos doce meses hasta marzo de 2025, y que su Ebitda ajustado a gastos por intereses se situará en torno a 3 veces en 2025», ha señalado la agencia, que estima además un flujo de caja libre (FCF) ajustado para la compañía de aproximadamente 250-270 millones de euros durante los próximos 12-18 meses y una liquidez continuada. «La perspectiva positiva refleja nuestras expectativas de que el rendimiento operativo y las métricas crediticias de Grifols seguirán mejorando durante los próximos 12 a 18 meses», ha subrayado Moody’s, que destaca además en su informe que la calificación ‘B2’ también refleja la «sólida» posición de mercado, la escala y la integración vertical de la compañía en productos derivados del plasma sanguíneo humano, relevantes para la industria. A ello se suma los favorables impulsores fundamentales de la demanda del sector, las elevadas barreras de entrada al sector debido a la regulación, la fidelización de los clientes y su «excelente» historial de seguridad de los productos. La agencia de calificación también considera el alto nivel de apalancamiento actual de la compañía , la alta intensidad de capital del negocio y las necesidades de capital circulante, que «pueden experimentar grandes fluctuaciones durante el ejercicio fiscal y que son importantes impulsores del flujo de caja libre (FCF)». En opinión de Moody’s, las consideraciones de gobernanza fueron «clave» para la calificación, en particular los recientes cambios en el consejo de administración de la compañía y una mayor visibilidad de la nueva política financiera y la estrategia de asignación de capital de la compañía. «Prevemos que el crecimiento de los ingresos brutos de la compañía se situará en un rango de un dígito medio a alto en términos porcentuales durante los próximos 12 a 18 meses, impulsado principalmente por la alta demanda de productos derivados del plasma », ha subrayado la firma estadounidense. Respecto a la liquidez de la compañía, Moody’s considera que es «buena», respaldada por 753 millones de euros en saldos de caja a finales de marzo de 2025 y una línea de crédito revolving (RCF) totalmente disponible de 938 millones de dólares con vencimiento en mayo de 2027. Moody’s explica además que podría mejorar la calificación si se mantiene la mejora en el rendimiento operativo, financiero, la rentabilidad y la generación de flujo de caja, informa Ep.