Publicado: junio 1, 2025, 5:56 am
Las viviendas de uso turístico se han extendido por buena parte del territorio nacional hasta representar una proporción significativa de los alojamientos en los que se hospedan los viajeros. En 50 de las cien ciudades españolas más turísticas la capacidad de los alquileres vacacionales anunciados en plataformas online supera ya el número de plazas hoteleras, según el Atlas de Contribución Municipal del Turismo en España publicado recientemente por Exceltur, que achaca a la proliferación de pisos turísticos el aumento de la presión sobre algunos destinos y las reacciones vecinales en forma de protestas contra la masificación turística.
A partir del análisis de los 500 principales destinos nacionales, el estudio apunta a que el volumen de plazas en viviendas turísticas ha aumentado un 25,3% desde 2022, un alza significativamente superior al incremento del 2% de las plazas hoteleras. La creciente irrupción de esta nueva fórmula alojativa en los últimos dos años ha sido incluso más marcada en grandes destinos como Madrid, Barcelona, Sevilla o Valencia, que son las cuatro capitales con mayor oferta turística —ofrecen respectivamente un total 176.702, 137.550, 63.141 y 60.947 plazas de alojamiento—. En estos puntos el volumen de alquileres vacacionales ha crecido respectivamente un 48,8%, 26,4%, 31,8% y 56,4% en dos años.
También en otras zonas concurridas como Málaga, Benidorm y Marbella las plazas en pisos turísticos han crecido más de un 20% entre 2022 y 2024. El incremento supera incluso el 50% en destinos tradicionales de sol y playa como Oropesa del Mar (Castellón), Gandía (Valencia) y Santa Pola (Alicante), así como en puntos más urbanos como Zaragoza o Gijón. En total, entre las cien localidades españolas con mayor oferta turística, el alquiler vacacional ha ganado peso en los últimos dos años en 92 de ellas, mientras que el volumen de plazas hoteleras ha crecido en 66, siendo Cádiz la ciudad que ha experimentado el mayor aumento (30,8%).
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Fruto de esta evolución, en la mitad de estos destinos principales la oferta de pisos turísticos en plataformas online supera ya a la de hoteles. La mayor diferencia en favor de la primera de estas fórmulas se da en zonas de costa como Torrevieja (Alicante), Mijas (Málaga), Denia (Alicante), Jávea (Alicante), Orihuela (Alicante), Santa Pola (Alicante) y Teulada (Alicante), donde más del 60% de las plazas de alojamientos son alquileres vacacionales.
En 47 de las cien localidades más visitadas por los viajeros, más de un tercio de la oferta son pisos turísticos, aunque el modelo de mercado varía en función de la zona. Frente a este predominio en el litoral mediterráneo —especialmente en la Costa Blanca— de las viviendas vacacionales anunciadas en plataformas online, en los cinco destinos de mayor capacidad sigue predominando la oferta hotelera, que concentra el 54,3% de las plazas en Madrid, el 64,5% en Barcelona, el 49,4% en Benidorm (Alicante), el 49,9% en San Bartolomé de Tirajana (Las Palmas) y el 50,3% en Salou (Tarragona).
En el caso de las capitales de provincia, en 13 de ellas la capacidad de los pisos turísticos es mayor a la de los hoteles y en ocho las plazas de viviendas vacacionales representan más de la mitad de la oferta total de alojamientos. Es el caso de Valencia (52,3%), Málaga (60,9%), Alicante (53,5%), Las Palmas de Gran Canaria (55,3%), Santander (51%), Burgos (53,4%), Pontevedra (58,5%) y Ourense (52,2%).
«Cambio de paradigma»
Exceltur señala que, aunque los destinos de sol y playa siguen teniendo «mayor relevancia» a nivel nacional, el atractivo de las zonas urbanas ha crecido en los últimos años, representando ya el 19,5% de toda la oferta turística nacional. «Resulta prioritario que estos destinos adopten medidas eficaces para salvaguardar los elementos de identidad local y el estilo de vida en sus barrios más emblemáticos, previniendo fenómenos de gentrificación y expulsión de residentes», advierte la asociación de empresas turísticas, que subraya la contribución socioeconómica del turismo, pero invita a abrir una «reflexión» sobre la capacidad de acogida de los lugares más tensionados y aboga por un «cambio de paradigma» en la manera de entender y medir el «éxito turístico».
En particular, Exceltur pone el foco sobre la proliferación de viviendas turísticas anunciadas de forma ilegal en plataformas online sin contar con los permisos pertinentes. La asociación sectorial sostiene que esta fórmula alojativa supone una menor capacidad de generación de empleo y contribuye en menor medida a la generación de ingresos tanto turísticos como fiscales. Entre otras medidas, piden a las administraciones públicas aumentar los «instrumentos legales» para impedir la comercialización de pisos turísticos que no cumplan con la normativa vigente.
Anuncios ilegales
En esa línea, con el objetivo de perseguir los casos de fraude, el Ministerio de Vivienda ha puesto en marcha la denominada ventanilla única digital de alquileres de corta duración, un nuevo sistema que obligará a partir de julio a que todas los pisos turísticos, arrendamientos temporales y de habitaciones anunciados en plataformas online tengan que contar con un número de identificación que verificará que cumplen con la normativa estatal, autonómica y local.
En paralelo, el Ministerio de Consumo ha advertido tanto a Airbnb como a los respectivos ayuntamientos de la detección de multitud de viviendas vacacionales ilegales, instándolos respectivamente a la eliminación de los anuncios y a forzar su cierre. En su última actuación, el departamento de Pablo Bustinduy localizó casi 66.000 anuncios ilegales, que, según Exceltur, equivaldrían a 250.000 plazas turísticas, es decir, a las mismas plazas hoteleras que suman las ciudades de Madrid, Barcelona, Valencia, Sevilla y Málaga juntas.
Además, el Gobierno pretende también elevar el IVA de los pisos turísticos al 21% para que tributen como una actividad económica. El cambio afectaría a todas las viviendas vacacionales ubicadas en municipios de más de 10.000 habitantes y, en línea con la nueva regulación europea, serían las plataformas digitales las responsables de pagar el impuesto, por lo que los propietarios no podrían deducírselo. El PSOE ha incluido esta medida en una proposición de ley registrada hace diez días en el Congreso de los Diputados y elaborada junto a los ministerios de Vivienda y Hacienda para mejorar el acceso a un techo tratando de de desincentivar el empleo de las viviendas a este fin y fomentar, en su lugar, su salida al mercado como alquileres residenciales a precios asequibles.
