Publicado: junio 29, 2025, 3:21 pm
El viernes saltaba la noticia de que Marius Borg Høiby, hijo de la princesa Mette-Marit de Noruega, ha sido imputado por 23 delitos, tres de ellos violaciones, según informó la Policía de este país nórdico, que ha finalizado la investigación del caso.
Høiby, fruto de una relación de Mette-Marit anterior a su matrimonio con el príncipe heredero Haakon, está imputado por un caso de violación, dos de violación sin coito y cuatro de comportamiento sexual ofensivo, en una lista que también incluye amenazas, vandalismo, abusos y delitos de tráfico.
Otros posibles delitos, como el de abuso en relaciones íntimas contra una de sus exnovias, han sido archivados, en cambio, por falta de pruebas.
Tras conocerse la noticia, expertos del país noruego han hecho un repaso de la complicada situación en la que se queda la Casa Real noruega. Según señala el experto político Hans Engell a Ekstra Bladet, «Marius Borg Høiby ha arrojado a la familia real noruega al caso más grave en el que se ha visto involucrada una familia real desde que el príncipe Andrés fue señalado por su relación con Jeffrey Epstein y sus escándalos sexuales».
Para el experto, «es un desastre para la familia real noruega que el hijo de la futura reina consorte esté acusado de una serie de asuntos muy graves». «Los cargos amenazan la existencia de la familia real noruega con consecuencias extremas […] Será un caso que paralizará a la casa real», opina.
«Marius no es de la realeza ni forma parte de la familia real oficial noruega, pero es parte de la familia del príncipe Hakkon, heredero noruego, y muchos los miran y se preguntan: ¿Cómo ha podido desarrollarse de esa manera y dónde han estado como padres?», añade Engell.