Publicado: junio 25, 2025, 2:47 am
Apenas un día para que Ilia Topuria comience el proceso más complicado de toda su preparación: el recorte de peso. Esta vez, se enfrentará a Charles Oliveira en la categoría del ligero (155 libras o 70, 3 kilos). Esto supone un cambio, pues el hispanogeorgiano tendrá que bajar menos libras que en sus anteriores pleitos. Aun así, el proceso sigue suponiendo un sufrimiento para cualquier atleta. Jesús Gallo , quien es el preparador físico de Topuria, ha atendido a ABC MMA a pocos días del choque. «Por muy fácil que se vea al subir de categoría , es un recorte de peso y vamos a sufrir . El sufrimiento empezó el domingo donde la sal se disminuye, el lunes se cortan los hidratos y comienza la carga de líquido para después bajarla y llegar al corte que queremos lo más fácil y pronto posible. No es más sencillo, pero se alargó la felicidad de poder comer con un poco más de libertad sin tener la preocupación de hacer todo enfocado al corte de peso. Lo bueno de este campamento es que se ha enfocado en mejorar cada día todas sus fases como atleta sin tener en mente si puede comer de una cosa u otra», explica relativo a la bajada de peso para este periódico. Para ese último día, en el que se bajan de forma más extrema los últimos kilos, Gallo revela el proceso que seguirán. «Haremos una sauna pasiva y una momia (enrollar el cuerpo en toallas de forma que no escape el calor) en combinación para poder mantener al cuerpo sudando y prolongar lo que se adquiere en la sauna en una forma más pasiva en la que el cuerpo está descansando porque está tumbado», relata. Pero ascender de categoría no solo implica una mayor comodidad para bajar el peso, sino también un aumento en aspectos como la pegada . «Genéticamente Dios le dio ese don. Tiene una constitución muy gruesa. Su masa de esqueleto y muscular son mucho más potentes de lo normal. A nivel físico es una persona superdotada . Pero lo que más tiene él es la mente. Eso lo separa de otro atleta. Tiene una confianza en él, en su calidad, en su don como peleador, competidor… Sabe que va a ganar. Y sabe que las posibilidades de que el otro pueda tener un poco de su fuerza es mínima o ninguna. La masa muscular estaba mucho más arriba del campamento previo. Eso supone más potencia, fuerza, capacidad física…», señala Gallo. Relativo al combate, el preparador físico sigue en la línea del resto del equipo: «Creo que es el momento de Ilia . Sé que está en el momento de seguir siendo una estrella. Ya vendrá un tiempo en el que no pueda hace hoy en día y le tocará a otro, pero este es el momento de Ilia para ser lo mejor de lo mejor en este deporte», afirma. Por último, como encargado del aspecto físico, no existe voz más autorizada para determinar si podría o no subir al peso wélter (170 libras o 77, 1 kilos). «Poder, podemos. Todo depende de que él quiera o no quiera hacerlo. Creo que sí, que poder se puede», sentencia.
