Publicado: agosto 3, 2025, 8:23 pm
Las modas van y vienen, y forman parte de la vida social de manera natural e, incluso, divertida en España. Sin embargo, no vale todo al menos desde el punto de vista de la salud, como sucede con las prendas demasiado ajustadas y, más concretamente, los pantalones exageradamente apretados. Más allá de una cuestión de gustos, utilizarlos a menudo puede tener consecuencias serias.
Como advertencia de los posibles riesgos que corremos si utilizamos pantalones excesivamente ‘skinny’ de manera habitual, el doctor Manuel Viso publica en sus redes sociales un vídeo en el que enumera y explica los órganos que podrían verse afectados de la compresión que ejercen este tipo de prendas, tanto a nivel digestivo como circulatorio, ginecológico y del sistema nervioso.
¿Qué es el síndrome del pantalón ajustado?
Conocido técnicamente como meralgia parestésica, el síndrome del pantalón ajustado sucede por compresión del nervio femorocutáneo lateral, que se extiende por la parte externa de los muslos, y que puede ocasionar síntomas como hormigueo, ardor, dolores en las piernas o entumecimiento de la zona.
Lejos de ser una anécdota, este síndrome es más habitual de lo que cabría esperar, puesto que dificulta la circulación de la sangre en el tren inferior, puede provocar edemas, varices, irritación por dermatitis de contacto, infección por falta de transpiración, problemas ginecológicos como candidiasis, reflujo gastroesofágico o alteraciones en el sistema nervioso periférico. Todo eso, por ajustarse demasiado los vaqueros.
«Tus vaqueros ajustados podrían estar saboteando tu salud»
Manuel Viso se muestra así de contundente para comenzar a explicar porqué hay determinadas prendas que no nos interesa llevar en absoluto, si lo que queremos es mantener la salud. Con «tus vaqueros ajustados podrían estar saboteando tu salud» se refiere a todas las consecuencias de esta moda tan poco recomendable.
Aunque existen muchos más posibles efectos secundarios de llevar pantalones ultra-estrechos, Viso selecciona los más importantes. «Sientes hormigueo, ardor o entumecimiento en tus muslos? Esto puede estar pasando por compresión del nervio cutáneo femoral lateral y por culpa de tus pantalones».
¿Y el sistema digestivo? ¿También sufre? «Si has notado hinchazón, acidez o tu tripa está dura después de comer, quizá no se trate de lo que has comido, sino de tus vaqueros aplastando tu abdomen como una croqueta. De esta forma, el contenido del estómago refluye hacia el esófago, con acidez, digestiones pesadas e hinchazón abdominal».
¿Y qué pasa en nuestro diafragma con este síndrome?
Efectivamente, oprimir nuestro estómago y la circulación de una manera antinatural no solo tiene consecuencias sobre el reflujo o las piernas, sino que podría afectar a nuestra respiración. Viso lo explica de la siguiente manera: Si respiras raro cuando te pones los jeans mega ajustados, «es normal, porque tu diafragma se ha puesto en huelga«.
Al comprimir la cintura, «estás provocando que el cuerpo haga respiraciones más superficiales, que son más rápidas y menos eficientes. Tu sangre intenta fluir, pero tu pantalón dice ‘¡por aquí no pasas!’. El resultado son piernas hinchadas, varices calambres…»
El síndrome del pantalón ajustado y la salud íntima
Para finalizar con el mapa de las posibles consecuencias de seguir la moda sin atender a la salud, el doctor habla de los problemas que genera este síndrome en la salud íntima. Candidiasis, foliculitis, cistitis… todas estas infecciones pueden verse agravadas (y mucho) por un pantalón demasiado ajustado, que oprime.
«Tu vaquero puede no ser tan amigo de tu zona íntima como creías. ¿Te suena haber padecido alguna vez infecciones inexplicables, rozaduras, picores?»… pues piensa qué ropa llevabas puesta.
Algo parecido sucede con el suelo pélvico, que también puede verse afectado. La clave es tan sencilla como «optar por vaqueros elásticos con un corte más cómodo como los MOM jeans, por ejemplo. Recordad que la moda pasa, pero la salud es para toda la vida», concluye Manuel Viso.