Publicado: julio 9, 2025, 4:23 am
En medio de tensiones comerciales con Donald Trump por los aranceles y en pleno incremento del gasto en defensa para reforzar su autonomÃa estratégica, Bruselas comienza a tomarse cada vez más en serio la amenaza que representa Rusia. Como parte de esa respuesta , la Unión Europea prevé presentar una ambiciosa estrategia de almacenamiento que abarcará desde suministros médicos y materias primas crÃticas hasta equipos energéticos, refugios, e incluso alimentos y agua. En esta misma lÃnea, el ‘Financial Times’ ha revelado que el puerto de Róterdam —el más grande de Europa— se está preparando para un eventual conflicto con Rusia. El puerto está reservando espacio para barcos con suministros militares y planificando rutas alternativas para desviar carga civil en caso de estallar una guerra. Boudewijn Siemons, director ejecutivo de la Autoridad del Puerto de Róterdam, ha confirmado que ya se están coordinando operaciones con el puerto de Amberes para gestionar la llegada de vehÃculos y equipamiento militar procedente de Estados Unidos, Reino Unido y Canadá. Estas medidas coinciden con la advertencia lanzada en junio por el secretario general de la OTAN, Mark Rutte , quien alertó a los paÃses aliados sobre la posibilidad de que Rusia ataque uno de los principales puertos europeos en 2030. El puerto de Róterdam, como detalla la empresa de transporte y agencia de aduanas Kokargo, está situado estratégicamente en la desembocadura del rÃo Rin y en la costa del Mar del Norte, su posición geográfica lo convierte en un punto crucial para el comercio internacional, no solo para los PaÃses Bajos sino para toda Europa. Rotterdam se encuentra a aproximadamente 60 kilómetros de La Haya, la capital administrativa de los PaÃses Bajos, lo que facilita el acceso a importantes arterias logÃsticas . Este puerto se extiende a lo largo de 42 kilómetros y gestiona aproximadamente 436 millones de toneladas de carga al año, con un tráfico de 28.000 buques por mar y 91.000 por vÃa fluvial, provenientes principalmente de Alemania y el interior del continente. Por su parte, el puerto de Amberes , con 240 millones de toneladas anuales, es el segundo más grande de la Unión Europea. «No todas las terminales están preparadas para manejar carga militar. Si tuviéramos que gestionar grandes volúmenes de material bélico, recurrirÃamos a Amberes u otros puertos para complementar la capacidad» , explicó Siemons. Añadió que actualmente, solo la terminal de contenedores de Róterdam puede transferir municiones de forma segura entre barcos. Róterdam ya tiene experiencia en el manejo de armamento, con un notable aumento del tráfico militar durante la Guerra del Golfo a partir de 2003. Ahora, además de esta movilización logÃstica, se han programado ejercicios militares anfibios en la región. En mayo, el Ministerio de Defensa de los PaÃses Bajos anunció que el puerto deberá disponer de espacio para recibir múltiples buques de carga militar en respuesta a peticiones de la OTAN. Según destaca el FT, esto forma parte de una ola de preparativos bélicos que se extiende por todo el continente. Siemons recordó que, tras la crisis del petróleo de 1973, la UE instó a los paÃses miembros a mantener reservas estratégicas de crudo suficientes para 90 dÃas. En ese mismo espÃritu, subraya ahora la necesidad de crear reservas similares para materias primas crÃticas como el cobre, el litio o el grafito, asà como para garantizar la seguridad energética con el gas y fortalecer la resiliencia estratégica en el sector farmacéutico . En este sentido, afirma que los puertos , por su capacidad logÃstica y sus redes de distribución, son lugares idóneos para almacenar este tipo de recursos estratégicos.