Publicado: noviembre 4, 2025, 8:23 pm
El programa europeo Copernicus , un proyecto pionero que observa la Tierra los 365 días del año, 24 horas al día, está a punto de sumar un nuevo integrante a su constelación de satélites. Se trata del Sentinel-1D, el cuarto satélite de la misión Sentinel-1, que está listo para despegar rumbo al espacio. El lanzamiento se realizará este martes 4 de noviembre, a las 22:02 (hora española), desde el Puerto Espacial de Kourou, en la Guayana Francesa. La operación se llevará a cabo a bordo de un cohete Ariane 6, el nuevo gran cohete europeo que completará su cuarto vuelo desde su inauguración el año pasado . La Agencia Espacial Europea (ESA) transmitirá el evento en directo a través de ESA Web TV (que se podrá seguir aquí mismo, en ABC.es sobre estas líneas), con una programación que comenzará a las 21:15 hora española. La programación incluirá entrevistas con especialistas, actualizaciones sobre el estado de la misión y, por supuesto, el esperado momento del despegue, que está previsto para las 22:02. Se prevé que la primera señal del satélite sea recibida hacia las 23:22, seguida de una conferencia de prensa programada para las 23:30. La misión Copernicus Sentinel-1 se basa en una constelación de dos satélites idénticos con tecnología radar -por lo que pueden ver la superficie terrestre independientemente de que sea día o noche, además de traspasar las nubes y tormentas- que vuelan en la misma órbita pero separados por 180 grados. Sus principales funciones incluyen la observación de desastres naturales como inundaciones y deslizamientos de tierra para proporcionar información sobre el alcance de los daños o datos para ayudar a los equipos de emergencia (como se demostró durante la dana de Valencia del pasado año ); la vigilancia marítima, incluyendo tráfico, hielo marino, derrames de petróleo; la observación del medio ambiente, en concreto de bosques, glaciares, uso del suelo y agricultura; así como la cartografía. El primero de la serie fue el Sentinel-1A, lanzado en abril de 2014, seguido por Sentinel-1B en 2016. La misión de Sentinel-1B finalizó en agosto de 2022 tras sufrir una fallo técnico que le impidió adquirir datos. El satélite fue desorbitado con éxito. Sentinel-1C fue lanzado en diciembre de 2024 para reemplazar a Sentinel-1B. «Ahora lanzamos el cuarto satélite Sentinel-1, el último de la primera generación, a bordo de un Ariane 6, lo que supondrá un hito importante para toda la comunidad espacial«, señala Ramón Torres, director de la misión del satélite Sentinel-1 en la ESA. »Ver cómo esta misión, la primera del programa Copernicus y pieza clave de la observación de la Tierra dentro del programa espacial europeo, se pone en órbita con el cohete de carga pesada más moderno de Europa, es un momento realmente trascendental». Por su parte, Simonetta Cheli, directora de Programas de Observación de la Tierra de la ESA, añade: «Es un verdadero mérito de la sólida colaboración entre la ESA y la Comisión Europea que ahora estemos preparando el lanzamiento de otro satélite para el programa Copernicus. Sentinel-1 ha proporcionado datos de radar vitales que se han utilizado en respuestas a emergencias, en estudios científicos y en la observación del clima; una variedad de aplicaciones que ponen de manifiesto el incalculable valor de Copernicus para nuestra sociedad». El lanzamiento correrá a cargo del Ariane 6, el nuevo cohete europeo cuyo vuelo inaugural tuvo lugar en julio de 2024. Con más de 60 metros de altura y un peso que puede alcanzar las 900 toneladas cuando está completamente cargado, este cohete que, de momento, no es reutilizable, representa un paso fundamental para garantizar la autonomía europea en el acceso al espacio y acabar con la llamada ‘ crisis de los lanzadores ‘. Su diseño modular le permite enviar satélites tanto a órbitas bajas como a misiones de exploración más lejanas. Con la puesta en órbita de Sentinel-1D, Europa refuerza su liderazgo en la observación del planeta y en la lucha contra el cambio climático. Este lanzamiento no solo es un logro técnico, sino también una muestra del compromiso del continente con la ciencia, la sostenibilidad y la cooperación internacional. Este martes, los ojos de Europa y del mundo entero están puestos en el centro espacial europeo en Kourou. Y, poco después, el Sentinel-1D comenzará a mirar hacia la Tierra, enviando desde el espacio datos valiosos que ayudarán a proteger el medio ambiente y mejorar la vida en nuestro planeta.
