Publicado: octubre 14, 2025, 7:23 am
Durante mucho tiempo los trasplantes de órganos eran casi imposibles porque el cuerpo rechazaba sistemáticamente cualquier tejido extraño que intentase establecerse en él, como si fuera un castillo medieval alzando sus puentes levadizos ante la llegada de un ejército enemigo. Antes de la década de 1970, cuando los pacientes recibían un nuevo órgano vivían con la constante amenaza de que su propio sistema biológico atacara ese regalo de vida, convirtiéndolo en una batalla perdida de antemano. En este escenario, aparentemente sin esperanza, surgió una sustancia milagrosa derivada de un humilde hongo y que cambiaría para siempre el destino de millones de personas en todo el mundo. Lo más fascinante de su historia es que su descubrimiento fue completamente accidental, un… Ver Más