Publicado: diciembre 21, 2025, 7:22 am
Los proveedores son una pieza clave en la cadena de valor de las empresas. Cuando una compañía está implementando los criterios ESG uno de los grandes retos a los que se enfrenta es «garantizar que se extiendan y se apliquen de manera rigurosa los estándares éticos, ambientales y de derechos humanos a toda la cadena de valor, especialmente en el ámbito internacional, donde el control es más complejo», explica May López Díaz, profesora de EAE Business School. Contar con proveedores que no cumplan con ciertos estándares puede tener graves consecuencias para la empresa, ya sean sanciones, problemas legales y daño a su imagen, además de poder perder la confianza de clientes e inversores. Jesús Reglero, profesor de OBS Business School y socio de RS Corporate, apunta a una importante mejora en este campo, con empresas que «exigen que los proveedores encajen con los objetivos que tienen. Vemos cada vez más unión con la cadena de valor». Hay una tendencia de asegurarse que los socios compartan sus mismos valores en cuanto a sostenibilidad ambiental, prácticas sociales justas y gobernanza corporativa sólida. No obstante, también tiene su complejidad. Se deben evaluar los criterios ESG de dichos proveedores por lo que cuanto más transparentes y colaboradores sean con sus socios, más fácil resultará dicha evaluación. En el campo medioambiental, es importante conocer cómo los proveedores gestionan su impacto ambiental, como el manejo de residuos, emisiones de carbono, consumo de recursos y políticas de sostenibilidad. En el social, se analiza la relación con los empleados, comunidades y clientes. Entre los aspectos a tener en cuenta están los derechos humanos y las condiciones laborales. En lo que se refiere a la gobernanza, se tienen en cuenta las decisiones de las empresas en temas como políticas anticorrupción o ética en los negocios. Ya se han desarrollado herramientas tecnológicas que ayudan a la medición y análisis de los criterios ESG. Por ejemplo, la plataforma Source-to-Pay (S2P) de Seres Grupo Docaposte, que permite integrar la gestión de proveedores sostenibles en todas las fases: homologación, evaluación inicial, seguimiento del cumplimiento en tiempo real (con alertas automáticas ante desviaciones) y reporting. Además, facilita la automatización de procesos, la estandarización de criterios y el acceso a indicadores que hacen más estratégica la gestión de compras sostenibles. Según indica esta compañía, el uso de herramientas S2P permiten la actualización en tiempo real de indicadores ESG, alertas ante incumplimientos y generación de reportes automáticos para la toma de decisiones estratégicas. Desde SERES recuerdan que las empresas y sus líderes tienen que ser capaces de medir su impacto en los empleados, los clientes, los proveedores y las comunidades en las que operan para poder respaldar la relevancia de lo social y hacer tangible su retorno. «Precisamente por eso la manera en la que atendemos los retos sociales ya forma parte de la agenda de los consejos y lo ha hecho de una manera consistente y continuada». En este sentido, SERES ha facilitado un marco común homogéneo que recoge además peculiaridades de cada sector», explica la directora general. Cree que una de las claves para que se logren mejores resultados es el de que todas las partes sean capaces de trabajar juntos. «La única vía para cumplir con estos objetivos es la colaboración: clave de competitividad en las empresas y uno de los activos más relevantes para las organizaciones», subraya Ana Sainz. Y señala también que aunque sea una dimensión exigente «es indispensable contar con un sector privado responsable, que favorezca el crecimiento, la productividad, la innovación con compañías y directivos, que conviertan el compromiso social empresarial en oportunidades».
