Publicado: agosto 5, 2025, 4:23 am
Dos jóvenes influencers rusas fueron detenidas tras publicar un vídeo en TikTok que se ha vuelto viral, donde aparecen bailando frente a un depósito de petróleo en llamas en Sochi, uno de los principales destinos turísticos de Rusia. El incendio fue provocado por un ataque con drones ucranianos y ha generado una ola de indignación en los círculos mediáticos afines al Kremlin, que acusan a las jóvenes de glorificar el éxito militar ucraniano.
El vídeo muestra a Dasha Vladimirova, de 21 años, y Karina Evgenieva, de 19, acompañadas por un hombre no identificado, moviéndose con actitud relajada mientras de fondo suena Crimson Dawn, un tema popular del rapero ruso Endshpil. A su alrededor, enormes columnas de humo negro se elevan desde las ruinas del depósito Rosneft-Kubannefteprodukt, una instalación vinculada a la empresa estatal Rosneft, que suministra combustible al ejército ruso.
Una vez subido a TikTok, el vídeo ganó rápidamente popularidad y obtuvo cientos de miles de visitas antes de ser retirado. Pero el daño ya estaba hecho. Los medios de comunicación estatales, en especial los alineados con el Kremlin, fueron rápidos en su condena: presentadores y analistas calificaron el clip como un «acto de traición moral» y exigieron detenciones inmediatas, disculpas públicas y arrepentimiento.
Poco después de que se difundiera el vídeo, las autoridades lanzaron una persecución para dar con las dos mujeres. En cuestión de días, Vladimirova y Evgenieva fueron detenidas en la zona de Sochi, no muy lejos del lugar del ataque con drones. Según fuentes cercanas, el incidente ha enfurecido a las altas esferas de Moscú porque, sin quererlo, las imágenes mostraron al mundo el éxito de un ataque ucraniano que el Kremlin intenta suprimir agresivamente en redes sociales.
Tras su detención, las jóvenes fueron presuntamente obligadas a grabar un vídeo de confesión, una táctica habitual de las autoridades rusas contra disidentes, influencers e incluso ciudadanos extranjeros. En las imágenes difundidas por el Estado, ambas aparecen visiblemente conmocionadas en una comisaría, pidiendo perdón a la cámara.
Vladimirova y Evgenieva enfrentan cargos por «incumplimiento de las normas de conducta en una emergencia o ante la amenaza de que se produzca», una figura legal ambigua que podría acarrearles multas de hasta 30 000 rublos (unos 350 euros). Aún no está claro si se añadirán cargos adicionales a medida que avance la investigación.
