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Con 200.000 fieles, la jerarquía eclesial y 130 delegaciones… así será el funeral de Francisco, que pidió una despedida sencilla

Publicado: abril 25, 2025, 6:23 am

La tradición del funeral del sumo pontífice tiene siglos de historia, pero ese rito solemne cambiará este sábado ante los ojos de la jerarquía eclesial, de hasta 130 delegaciones de jefes de Estado y Gobierno, de 200.000 fieles, así como de millones de espectadores que asistirán en diferido al funeral del papa Francisco, fallecido el lunes a los 88 años.

Fiel a su carácter de papa humilde y cercano, Francisco modificó los ritos de las exequias de todos los papas a partir del suyo propio, aprobando en 2024 una nueva edición del libro litúrgico Ordo Exsequiarum Romani Pontificis, que marca el protocolo tras la muerte del papa. Su objetivo fue hacer el funeral más parecido al de un pastor discípulo de Cristo que al de uno de los hombre más poderosos del mundo.

Sin embargo —con los ojos del mundo e puestos en Roma y en presencia de la élite eclesial y de los principales líderes mundiales— el Vaticano ha organizado un evento cuidadosamente estudiado, por el que velarán que afortunadamente tendrá lugar en una Roma vigilada por 4.000 policías y para la que el sábado se espera sol y 16 grados primaverales. Estos son los principales detalles de la ceremonia:

La liturgia: propia de un pastor

La liturgia del funeral, acto que normalmente se celebra entre 4 y 6 días después del fallecimiento del papa, será presidida por Giovanni Battista Re, Decano del Colegio Cardenalicio, frente a la Basílica de San Pedro.

Según lo previsto por el Ordo Exsequiarum Romani Pontificis, podrán concelebrar los Patriarcas y los Cardenales, (252), vistiendo la mitra de damasco blanco; los Arzobispos y Obispos, ataviados con amito, alba, cíngulo y mitra blanca sencilla; los presbíteros, que vestirán el amito, el alba, el cíngulo y la estola roja.

Durante la ceremonia, el Evangelio se leerá en latín y griego, se entonará el tradicional Subvenite Sancti Dei, una plegaria que invoca la ayuda de los santos para recibir el alma del pontífice, y en la homilía se destacará el legado del papa.

Entre las principales novedades introducidas por el papa Francisco en 2024 es que en las oraciones, para referirse a él, se utilicen títulos sencillos como «papa», «obispo de Roma» o simplemente «pastor» en sustitución de los tradicionales «Romano Pontífice» o «Sumo Pontífice».

El ataúd: uno, sencillo y cerrado

El cambio más visible de los anotados por el papa Francisco es el de la eliminación de tres ataúdes, para cambiar a uno solo. Tradicionalmente, los pontífices eran enterrados en tres ataúdes: uno de ciprés, uno plomo y otro de roble, encajados uno dentro del otro. La idea era crear una cubierta alrededor del cuerpo del sumo pontífice, con el simbolismo de cada material. Francisco optó por un único ataúd sencillo, de madera aunque revestido de zinc.

Durante el funeral el ataúd estará cerrado, porque será sellado ritualmente este viernes por la noche en un acto presidido por el cardenal Kevin Farrell, Camarlengo de la Santa Iglesia Romana. Al rito litúrgico asistirán varios cardenales y personalidades de la Santa Sede, y marcará el final del velatorio público.

Asistentes: más de 200.000 fieles

Al menos 200.000 personas se espera que acudan al funeral del papa Francisco este sábado en la plaza de San Pedro y otras 250.000 los días siguientes, para la elección de su sucesor, según las previsiones del jefe de la Protección Civil italiana, Fabio Ciciliano.

«Estamos analizando los flujos de fieles que llegan a Italia y a Roma -por carretera, en tren, en avión y en barco-, con especial atención a las llegadas desde América del Sur, especialmente desde Argentina», dijo.

Los anteriores funerales fueron los de Benedicto XVI, en 2013, aunque como papa emérito, y el de Juan Pablo II, en 2005. Decenas de miles de fieles asistieron al funeral del papa emérito Benedicto XVI, pero casi dos millones de personas se estima viajaron a Roma para asistir al funeral del papa Juan Pablo II, en abril de 2005.

Autoridades mundiales: reyes y jefes de Estado

En anteriores funerales papales las delegaciones de los gobiernos del mundo alcanzaron las 200. En esta ocasión han anunciado su presencia en el Vaticano, para despedir al papa Francisco, unas 130 de las máximas autoridades del mundo, entre ellas 50 jefes de Estado o de Gobierno y diez reyes, lo que propone un reto mayúsculo de seguridad y protocolo.

Estarán presentes, en representación de los europeos, las presidentas de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, y del Parlamento Europeo, Roberta Metsola, así como el presidente del Consejo Europeo, António Costa. Han confirmado el presidente de EEUU, Donald Trump; el de Francia, Emmanuel Macron; y el primer ministro británico, Keir Starmer. El presidente alemán, Walter Steinmeier, y el canciller Olaf Scholz también acudirán a Roma. Como el presidente de Hungría, Tamás Sulyok o el presidente y el primer ministro de Irlanda, Michael D. Higgins y Micheál Martin, entre otros líderes.

El secretario general de la ONU, António Guterres, viajará igualmente a Roma para el funeral y entierro del papa. El presidente ucraniano Volodimir Zelenski es otro de los líderes mundiales que ha anunciado su intención de acudir al funeral, donde se producirá su primer encuentro con Donald Trump después de la polémica reunión en la Casa Blanca.

Entre los latinoamericanos destaca la presencia del presidente de Argentina, Javier Milei, no en vano el papa Francisco es argentino. También ha anunciado viaje el presidente brasileño, Lula da Silva, el presidente dominicano, Luis Abinader y el ecuatoriano, Daniel Noboa.

La delegación española —diseñada «a la altura del cariño» profesado al pontífice, según expresó el Gobierno— está presidida por los reyes, Felipe y Letizia, a quienes acompañarán a Roma las vicepresidentas del Gobierno, María Jesús Montero y Yolanda Díaz, así como el ministro de Presidencia, Félix Bolaños, y el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo.

Entre las principales ausencias destacan la del rey Carlos III del Reino Unido, el monarca británico nunca acude a funerales, al que sustituirá el príncipe Guillermo, la de Pedro Sánchez, la de la presidenta mexicana, Claudia Sheinbaum, o la del ruso Vladimir Putin. Tampoco se espera en el Vaticano a numerosos líderes de Oriente, como el gobierno de China que rompió relaciones con la Iglesia el siglo pasado.

Sobre la ubicación de los mandatarios, varios expertos en protocolo han señalado que suele emplearse el orden marcado por el idioma oficial de la diplomacia vaticana, que es el francés. Una de las incógnitas será la colocación de Milei, el presidente argentino, al que se presupone una especial posición. También se espera que el presidente de Italia tenga el puesto de honor. Y que se tengan en cuenta aspectos cruciales de la geopolítica actual, como las fricciones entre Trump y Zelenski a costa de un posible acuerdo de paz en la guerra en Ucrania.

El entierro en Santa María la Mayor

Si Francisco dispuso que la ceremonia debía ser más sencilla, una mayor simplicidad marcará también su entierro.

Desde principios del siglo XX todos los papas han sido sepultados en grutas bajo la basílica de San Pedro, pero el féretro del papa Francisco será trasladado a la basílica de Santa María la Mayor de Roma para ser enterrado, tal y como dejó escrito el pontífice argentino.

«Solicito que mi sepulcro sea preparado en el nicho de la nave lateral entre la Capilla Paulina y la Capilla Sforza de la citada Basílica Papal», dejó escrito. Y añadió: «El sepulcro debe estar en la tierra; sencillo, sin decoración particular y con la única inscripción: Franciscus».

La tumba del Papa Francisco será de mármol de la región italiana de Liguria, la tierra de sus abuelos, y llevará, además de la inscripción ‘Franciscus’, la reproducción de su cruz pectora.

El cardenal camarlengo, Kevin Joseph Farrell, será el encargado de presidir el entierro en la basílica, que en principio quieren que se produzca en la más estricta intimidad.

El Vaticano ha informado de que «los pobres ocupan un lugar privilegiado en el corazón de Dios» y que por esta razón, un grupo de 40 pobres, transexuales, sin techo y migrantes acompañarán al féretro del Papa Francisco hasta instantes antes del entierro de su ataúd. Estas personas necesitadas estarán presentes en la escalinata de acceso a la basílica papal de Santa María la Mayor para rendir sus últimos homenajes al papa Francisco antes de la inhumación de su féretro.

Y, después, el cónclave de cardenales

Enterrado Francisco, el luto durará nueve días, un parte del rito funerario que no cambió el pontífice en su actualización del protocolo. En este periodo se celebrarán misas solemnes en la Basílica de San Pedro hasta el 4 de mayo. La última misa del periodo de luto tendrá lugar ese domingo a las 17.00 horas, y estará dirigida por el cardenal Dominique Mamberti, en la Capilla Papal.

Después darán comienzo los preparativos del cónclave, que tiene un plazo de convocatoria de 15 días después de la muerte de un papa. Será el momento de que los cardenales se reúnan para elegir entre sus filas al sucesor que podrá continuar con las reformas prometidas por Francisco o, por el contrario, revertirlas.

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