Publicado: agosto 13, 2025, 8:33 pm
En plena guerra con Gianluigi Donnarumma, fuera de la convocatoria para la Supercopa de Europa y con un pie fuera del club pese a ser uno de los grandes artífices de la consecución de la Champions League el curso pasado, Lucas Chevalier se reivindicó: pasó de cometer un error claro en el segundo tanto del Tottenham, a parar un penalti en la tanda para darle vida al PSG, que se llevó el trofeo a casa.
El guardameta francés, que se estrenó en la meta parisina con su primera titularidad, arrancó el partido con una parada de mérito a un zapatazo de Richarlison desde lejos, pero no pudo hacer nada para evitar el primero de los spurs al borde del descanso: Micky Van de Ven aprovechó el caos formado en el área en una falta para recoger el rechace del ex del Lille, que sacó una parada salvadora para evitar el gol solo para terminar viendo como acababa en la red.
A la vuelta del descanso, el Tottenham volvió a hacer gala de su poderío ofensivo con el segundo. Y es que, en otra jugada a balón parado en la que el PSG se durmió, el Cuti Romero apareció solo en el segundo palo para rematar la pelota. Lo vio el cancerbero francés, que metió las manos para intentar despejar el cuero, sin éxito, pues vio como apenas variaba su trayectoria y se colaba en su portería.
Pudo recortar distancias el equipo de Luis Enrique superada la hora de partido, cuando Bradley Barcola consiguió superar a Vicario, pero el tanto no subió al marcador por fuera de juego. De hecho, no fue hasta el minuto 84 cuando el conjunto parisino se metió en la pelea por la Supercopa de Europa, con un golazo de Kang-in Lee que hizo volver a creer a los suyos.
Se añadieron seis minutos de descuento en Italia: un mundo para el Tottenham y un regalo para el PSG, que lo aprovechó con creces. En cuanto el crono marcó el 93′, los de Luis Enrique aprovecharon el cansancio de su rival para forzar la tanda de penaltis, con un cabezazo de Gonçalo Ramos a un centro a media altura de Achraf Hakimi.
Y desde los once metros llegó la gran oportunidad de Chevalier: el PSG, que empezó perdiendo por el fallo de Vitinha, vio a su nuevo portero atajar el lanzamiento de Van de Ven para regalarle a los parisinos una vida más. Esta vez, no la desperdiciaron: Dembélé y Kang-in Lee convirtieron los suyos, y Nuno Mendes marcó el decisivo para darle al PSG su primera Supercopa de Europa.