Publicado: abril 9, 2025, 5:23 pm
La Policía italiana ha desmantelado una red criminal en el sur de Italia especializada en estafar a ancianos a través de llamadas telefónicas. Los timadores se hacían pasar por miembros de las fuerzas de seguridad para exigir dinero con el pretexto de «sacar de apuros» a un familiar que había causado un grave accidente.
En total, los agentes ejecutaron 77 medidas cautelares, de las cuales 22 son arrestos en prisión y las otras 55 consisten en presentarse diariamente -de forma obligatoria- ante las autoridades judiciales de Nápoles, según ha informado este miércoles la Policía de Estado italiana.
El grupo operaba desde Aversa y utilizaba la técnica del «falso accidente» para contactar telefónicamente a las víctimas, que eran personas mayores. Haciéndose pasar por agentes, pedían dinero u objetos de valor con el fin de resolver la situación de un familiar que supuestamente había causado un grave accidente.
Según la Policía, la organización criminal estaba estructurada de manera «jerárquica«, con «roles bien definidos»: unos realizaban las llamadas telefónicas para engañar a las víctimas, mientras los demás -denominados «trasladadores»- estaban repartidos por varias provincias italianas y se encargaban de recoger el dinero y los bienes sustraídos.
La Policía concluyó que el grupo utilizaba apartamentos acondicionados como centros de llamadas, donde realizaban entre 600 y 1.200 llamadas al día. Además, disponían de entre cinco y siete patrullas operativas en diversos puntos del territorio para recoger el dinero.
Una estafa en Génova, el detonante
Las investigaciones comenzaron en junio de 2023, después de una estafa en Génova que permitió confirmar la existencia del grupo criminal y delinear el papel de cada uno de sus miembros. Durante las pesquisas, la policía arrestó a otras 75 personas y se recuperaron bienes por un valor superior a 1,7 millones de euros.
La operación, en la que colaboraron agentes de brigadas de la Policía de Estado de múltiples ciudades del país, así como los Departamentos Locales de Prevención del Crimen, también implicó numerosos registros en los municipios de Nápoles y Caserta.