Publicado: mayo 31, 2025, 6:21 am
Brandon Hall, conocido artísticamente como Bug Hall, tenía solo nueve años cuando fue el elegido para interpretar a Alfalfa Switzer, el personaje principal de la película Una pandilla de pillos en 1994.
El alcance de la película, basada en La pandilla de Hal Roach de 1922, convirtió a Hall en una estrella infantil codiciada, y a lo largo de los ’90 le ofrecieron varios papeles en producciones importantes, como los títulos de Disney Cariño, nos hemos encogido a nosotros mismos o Hércules, en la que tuvo un pequeño papel de doblaje.
Sin embargo, a medida que pasaba el tiempo Hall no consiguió despuntar, y cada vez los papeles iban a menos tanto en cantidad como en importancia. A partir del año 2000, principalmente, hizo solo episódicos en algunas series de televisión, aunque en 2009 le ofrecieron otro papel protagonista en American Pie 7: El libro del amor.
Después de eso, prácticamente solo hizo pequeñas apariciones en televisión y películas de bajo presupuesto, hasta 2020, cuando su carrera actoral se vio definitivamente frenada después de ser arrestado.
Tal como informaron varios medios en aquel momento, la exestrella infantil habría sido arrestada por inhalar productos químicos volátiles, incidente que él mismo reconoció.
Convertido al catolicismo, tras el arresto decidió abandonar Hollywood y trasladarse junto a su mujer y sus hijos a una granja en Michigan, donde desde entonces siguen un estilo de vida «basado en la autosuficiencia y la fe», dedicando su tiempo a «la agricultura, la oración y la vida familiar», donando todo su excedente alimentario a su comunidad religiosa.
Todo aparentemente en orden, hasta que en septiembre del año pasado publicó en sus redes el nacimiento de su hijo, Mark Athanasius Chad Anthony Hall-Barnett of the Holy Cross, y lo hizo con la frase: «¡Tengo un heredero!«
Cuando, entre los comentarios, alguien señaló que Hall era ya padre de cuatro hijas y que, en teoría, la mayor de ellas sería su heredera, el exactor sentenció:
Dije heredero, no lavaplatos.
Las reacciones fueron de notoria indignación, algo a lo que el actor, que afirma ser «patriarca de cinco mujeres» y que tiene un amplio historial de publicaciones misóginas, anti LGTBI y a favor de los castigos corporales hacia los hijos, ya parece estar acostumbrado.
