Publicado: julio 24, 2025, 5:19 am
Guadalajara, Jal. La decisión de Estados Unidos de imponer un arancel de 17% al tomate fresco producido en México provocará pérdida de competitividad e incluso desempleo en las empresas que exportan su producción al vecino país, principalmente en los estados de Jalisco, Sinaloa y Sonora, afirmó el Tesorero del Consejo Nacional Agropecuario (CNA), Gerardo García Menaut.
En el caso de Jalisco, precisó, la afectación es mayormente para los productores de tomate cherry, ya que el estado es el principal productor a nivel nacional de esta hortaliza, y México abastece 90% del producto que se comercializa en Estados Unidos.
“Jalisco en lo que es (tomate) cherry, es el principal productor y exportador. Básicamente el cherry, como país, dominamos 90% del mercado de Estados Unidos hablando del cherry, y Florida es un productor muy importante en lo que es el jitomate normal y es quien está defendiendo el arancel a la exportación”, subrayó García Menaut.
Añadió que aún cuando el arancel afecta principalmente a los consumidores estadounidenses, también hace menos competitivos a los productores, ya que aumentan los costos en toda la cadena productiva al grado que el arancel de 17% en realidad termina generando un alza superior a 20% en los costos de los productores mexicanos.
“Los hace menos competitivos porque a la entrada, para los autoservicios y los brokers que compran el jitomate mexicano para distribuirlo y comercializarlo en Estados Unidos, les cuesta 17% más, pero se va más arriba, porque no es nada más 17% sobre el valor del jitomate, sino que ahí se engloba lo que es transporte, empaque, gastos aduanales; entonces, al final, pega en un veintitantos por ciento; eso les hace perder competitividad contra el producto que está en Estados Unidos”, explicó el tesorero del CNA.
Cadena productiva
“Lógicamente si empiezas a vender menos porque pierdes competitividad, esto genera desempleo y afecta a toda la cadena, no nada más es el empleo directo que das a los jornaleros o a los trabajadores de la empresa, sino a toda la cadena que son proveedores de suministros, desde agroquímicos, fertilizantes, prestadores de servicios, consumo de gasolina, llantas, diésel, etcétera, y tiene un impacto también al mismo gobierno porque está recabando menos impuestos al haber menores ingresos e incluso pérdidas”, abundó.
La implementación de un arancel de 17% al tomate mexicano entró en vigor el pasado 14 de julio, tras la decisión del Departamento de Comercio de terminar unilateralmente el Acuerdo de Suspensión del Tomate vigente desde el 2019, y volver a aplicar dicha tarifa.
Pide aranceles espejo
Por otra parte, el tesorero del CNA indicó que, con excepción del tomate, el sector agroalimentario del país no ha tenido afectaciones por las amenazas arancelarias de Donald Trump.
Descartó que la aplicación de un impuesto general de 30% a los productos mexicanos que entraría en vigor el próximo 1 de agosto vayan a aplicarse a los productos agroalimentarios dado que ambos países son complementarios y la medida, dijo, afectaría principalmente a los consumidores estadounidenses.
“Estimamos que de haber algo, no sería arriba de 10%, tomando como referencia ese 17% al jitomate que ha sido el más peleado y el más polémico durante más de 30 años”, enfatizó.
De ser así, el directivo del Consejo Nacional Agropecuario se pronunció porque México imponga aranceles espejo a los productos estadounidenses.
“No debe haber aranceles porque México como país no está cobrando aranceles a las exportaciones de los productos agrícolas de Estados Unidos y la postura es que si llegan a poner aranceles a los productos mexicanos, debemos de, conjuntamente con nuestro gobierno que es la Secretaría de Economía como administradora del Tratado de Libre Comercio, imponer aranceles a los productos agrícolas de Estados Unidos hacia México”, puntualizó.