Publicado: mayo 23, 2025, 12:23 pm
El cuerpo de Andriy Portnov, el expolítico ucraniano asesinado a tiros el miércoles en la localidad madrileña de Pozuelo de Alarcón, será trasladado a Ucrania para ser enterrado en Kiev, según ha informado este viernes una fuente cercana a los preparativos del funeral al medio ucraniano Espreso.
Según esta misma fuente, Portnov —exasesor del último presidente prorruso, Víktor Yanukóvich—, podría ser enterrado en el cementerio de Zvirinetske, uno de los más antiguos de Kiev.
«Querían (enterrarle) en Baikove, pero a los organizadores del funeral les dijeron que ‘sería un gran escándalo’ y propusieron Zvirnetske», ha asegurado la fuente en declaraciones al citado medio ucraniano. El cementerio de Baikove es el preferido de la intelectualidad y las élites de la capital ucraniana.
Portnov, exasesor de Yanukóvich
A sus 52 años, el expolítico ucraniano asesinado a tiros cuando acababa de dejar a sus dos hijas en el colegio, era uno de los pocos antiguos altos cargos de la administración de Yanukóvich que mantenía influencia dentro del país. Portnov escapó de Ucrania junto a Yanukóvich y otros integrantes del gobierno en 2014, tras meses de protestas callejeras por la decisión del presidente de no firmar el Acuerdo de Asociación con la UE como había prometido y apostar por lazos más estrechos con Rusia.
Portnov fue sancionado en 2021 por EEUU por supuestamente influir de manera indebida en la justicia y sabotear las reformas en el sistema. Con la llegada al poder del presidente Volodímir Zelenski en 2019, Portnov regresó a Ucrania y enseñó derecho constitucional en la Universidad Tarás Shevchenko de Kiev.
Ningún alto dirigente o portavoz oficial ucraniano se ha pronunciado hasta ahora sobre el asesinato de Portnov, que fue celebrado o recibido con comentarios sarcásticos en redes sociales por voces influyentes como el activista y recaudador de fondos para el Ejército Serguí Sternenko o la plataforma de análisis de la guerra DeepState.
El exasesor presidencial ucraniano Oleksí Arestóvich —que huyó del país tras adoptar una postura muy crítica con la administración actual de Kiev y ha sido sancionado recientemente por el supuesto contenido prorruso de su discurso— atribuyó la responsabilidad del asesinato a Zelenski, que, según dijo, se «prepara las elecciones» de esta forma.
Arestóvich declaró que «canales de Telegram asociados en Ucrania a la oficina del presidente» le han amenazado también a él y otras figuras críticas con la administración de Zelenski, como el diputado opositor Oleksí Goncharenko, o el bloguero ucraniano acusado de prorruso en su país Anatoli Sharí, que vive en España.
