Publicado: diciembre 17, 2025, 9:23 am
Tendemos a hablar de ellas como si fueran sinónimos, pero una alergia no es lo mismo que una intolerancia alimentaria, la primera es una reacción inmunitaria errónea, mientras que la segunda es una incapacidad para procesar un nutriente. Las alergias alimentarias afectan a un 5 % de adultos en España.
Así lo recoge la Sociedad Española de Alergología e Inmunología Clínica, un dato que ya parece destacable, no obstante, son más aquellos que presentan una intolerancia. Una de las más frecuentes es la intolerancia al gluten, que es cada vez más frecuente en nuestra sociedad, algo que ha querido analizar el doctor Sebastián La Rosa.
El trigo actual y su relación con la intolerancia al gluten
Las personas que tienen intolerancia al gluten necesitan tomar medidas y cambiar su alimentación, esto implica eliminar trigo, cebada y centeno de su dieta. Gracias a eliminar el gluten de sus comidas podrán reducir los síntomas que esta proteína provoca. Esta intolerancia cada vez afecta a más personas, algo que ha querido analizar el doctor Sebastián La Rosa, médico especialista en longevidad y bienestar integral.
Desde siempre el trigo ha formado parte de nuestra alimentación, pero, según afirma el especialista, el trigo que se consume actualmente no es el mismo que se tomaba hace años, lo que explicaría por qué hay tantos problemas de intolerancia al gluten ahora que antes no existían. «Durante miles de años fue un alimento básico, pero en el último siglo algo cambió», explica en sus redes sociales, que emplea como plataforma para divulgar sus conocimientos. «El 99% del trigo actual fue modificado durante el siglo pasado, generando una variedad conocida como trigo semi enano».
Esta modificación fue clave para salvar del hambre a muchas personas, hizo que el trigo fuera «más resistente a las sequías, es más fácil de cultivar, tiene más almidón». Sin embargo, no todo es positivo, porque también es «más inflamatorio para nuestro cuerpo», explica La Rosa.
«Este nuevo trigo contiene hasta 3 veces más gluten que el original. Especialmente una proteína llamada gliadina, que está relacionada con los síntomas de intolerancia al gluten que muchas personas experimentan hoy». La gleadina es una de las proteínas inflamatorias que forma el gluten.
Qué comer en una dieta libre de gluten
Las personas que tienen intolerancia al gluten deben retirarlo de su dieta y para eso es esencial prestar atención al carro de la compra, porque muchos alimentos contienen gluten sin que seamos conscientes de ello. Por suerte, cada vez hay más productos en el supermercado que se especifica que no contienen gluten, lo que hace que sea un poco más sencillo excluirlo.
Las frutas y las verduras frescas no contienen gluten, por lo que se pueden comer sin problemas, así como las legumbres y los frutos secos sin procesar. Alimentos como carnes y pescados, así como los huevos, son seguros. También los lácteos con bajo contenido en grasa y, en general, los alimentos que están poco o nada procesados.
Además de las harinas de trigo, cebada y centeno, es probable que la de avena tampoco pueda consumirse, porque si bien la avena en su estado natural no contiene gluten, es probable que durante el procesado se ‘contamine’. Sucede igual con las carnes procesadas, como las de las hamburguesas, salchichas o fiambres. Algunas salsas también pueden contenerlo, así como las galletas, las patatas fritas y los dulces, también la cerveza, a no ser que diga explícitamente lo contrario.
Referencias
La buena noticia es que no tienes que evitar todos los granos por completo. (s. f.). Mayo Clinic. https://www.mayoclinic.org/es/healthy-lifestyle/nutrition-and-healthy-eating/in-depth/gluten-free-diet/art-20048530
