Publicado: diciembre 15, 2025, 3:23 pm
La opositora venezolana María Corina Machado , ganadora del Nobel de la Paz , padece una fractura vertebral desde que abandonó Venezuela la semana pasada, anunció este lunes su portavoz. «Está confirmada la fractura vertebral», indicó Claudia Macero en alusión a un artículo publicado en el diario noruego Aftenposten . «Por el momento, no se dará ninguna información extra a la que aparece en el artículo», agregó. Según el diario, la fractura se produjo cuando la llevaban en un pequeño barco pesquero , con la mar agitada. Le diagnosticaron la lesión en el hospital universitario Ullevål DE Oslo, precisa el Aftenposten. La opositora, de 58 años, llegó a Oslo el jueves de madrugada, demasiado tarde para asistir a la ceremonia de entrega del galardón, que recogió su hija Ana Corina Sosa . Desde su llegada a Noruega, dijo varias veces que deseaba ir al médico , sin explicar por qué. Su fractura no le impidió pasar por encima de una barrera para saludar a simpatizantes suyos en la capital noruega, en su primera aparición pública en el país nórdico. A riesgo de ser declarada fugitiva en su país, donde vivía en la clandestinidad, Machado dejó Venezuela en unas condiciones sobre las que ha mantenido el misterio. Según Bryan Stern , un excombatiente estadounidense que fundó una empresa para sacar a extranjeros de zonas peligrosas, su salida del país sudamericano fue posible gracias a una rocambolesca operación , denominada ‘Dinamita Dorada’. Según contó Stern, Machado dejó Caracas disfrazada y con una peluca, y se dirigió a una playa del norte del país. Ya en la playa, la embarcación en la que debía escapar —un viejo pesquero elegido para no levantar sospechas ni exponerse a los bombardeos estadounidenses en el mar Caribe contra buques que, según Washington, transportan drogas— estaba averiado. Al final logró embarcar pero el GPS no funcionaba . Entumecida de frío y empapada, pasó a otro barco, en el que se encontraba Bryan Stern. A bordo de ese barco llegó a Curazao, desde donde tomó un avión privado que la llevó a Oslo, previa escala en Estados Unidos. «Hubo momentos que sentí que había riesgo real para mi vida, y que fue un momento también muy espiritual porque, al final, simplemente sentí que estaba en las manos de Dios», declaró Machado el viernes en Oslo.
