Publicado: octubre 17, 2025, 9:01 pm
No fue superior el Espanyol en el cómputo del encuentro. Pero ganó 0-2 porque supo esperar y fue contundente en defensa, con un Riedel sensacional y un Romero que está en todo-. Es decir, como un equipo grande. Así cosechó su primera victoria fuera de casa, que le aúpa a la quinta plaza. El Oviedo plantó cara, pero se deshinchó y vio cómo a su rival los cambios le aportaron energía. Se reafirman los de Manolo, se reencuentran con la victoria y van en serio. Pasó de todo antes del pitido inicial. La realización televisiva de LaLiga no mostró la protesta -diez segundos sin jugar- de Oviedo y Espanyol por la organización del Villarreal-Barça en Miami. Ambiente brutal en el Carlos Tartiere: bufandas al aire, gaitas y un tifo espectacular. Que equipos históricos y con una masa social tan potente con el Oviedo asciendan claramente aumenta la calidad de la competición como producto deportivo. Vuelta de parón y con cambios estructurales en ambos conjuntos. Cambio de presidente en el Espanyol, lo cual no debería influir en el verde, y de entrenador en el Oviedo, que reestrenó al ya conocido Luis Carrión, aún con cuentas pendientes con su afición. Al Espanyol le faltaba su figura: Puado . Kike le sustituyó. El Oviedo salió con una propuesta agresiva e incomodó a los periquitos, pero le costó tener ocasiones por su propia imprecisión, más que por mérito del Espanyol, blando sin balón y bloqueado con él. Los pericos fueron encontrándose e hicieron daño, pero entonces se toparon con un Aarónm Escandell imperturbable. Primero la tuvo clarísima Kike, pero el meta del Oviedo dio una brutal muestra de reflejos. Volvió avisar Roberto poniendo la punta de la bota un toque de Kike -de eso vale tener dos puntas-, y de nuevo el portero frustró la acción. La tiro libre de Milla sobrevoló la barrera y se dirigía a la red, pero adivinen. Menudas tres paradas por parte del valenciano. Tras el descanso, los periquitos perdieron el progreso que habían hecho al final de la primera mitad, y el único que intermitentemente aportaba visos de ofensividad era Carlos Romero, absolutamente omninpresente. Reina, cuando apenas llevaba un minuto jugando, recibió un balón cerca de la frontal y lo mandó a la madera. Peor el mejor del partido estaba siendo Riedel. El central alemán se ha ganado a base de méritos la titularidad, está imperial en los duelos y marcajes e, incluso, se incorpora al ataque. Le hicieron un claro penal en el 63 pero estaba en fuera de juego. Pero, como en la primera mitad, se fue rehaciendo el Espanyol. A Milla se le fue alto el cabezazo y se lamentó dando puñetazos al césped. Pese a que no es igual de letal que en las primeras jornadas su mejora es notable. Se fue rompiendo el partido y la sed de victoria echó hacia adelante a ambos conjuntos. Chaira quebró a Rubén Sánchez y encontró espacio, pero remató con demasiado ímpetu. El primer gol llegó en la jugada menos estética del encuentro, aunque vale lo mismo. El balón quedó muerto en el área y se formó un revuelo de piernas, pero finalmente el toque del conquense metió el balón dentro, por poco. Gol tras revisión. El tanto le hizo daño al Oviedo, que se desdibujó, mientras que el Espanyol se soltó y le sentaron bien los cambios de Manolo. Ocasión clarísima de los pericos pero Aarón era incansable, pero el meta no pudo ya paliar la siguiente. Omar, recién ingresado, centró tras un contragolpe y rozó Roberto la rozó, un error que lejos de perjudicar la jugada ralentizó la pelota y permitió a Pere Milla mandarla a la red. Se reafirma el Espanyol y confirma, con esta primera victoria a domicilio, que ha madurado, tiene automatismos y está para no sufrir. FICHA DEL PARTIDO OVIEDO: Escandell, Bailly, Carmo, Abdel, Vidal, Dendoncker, Colombatto (80′ Ejaira), Chaira (80′ Forés), Hassan (65′ Brekalo), Ilic (46′ Ilic), Rondón (65′ Viñas). ESPANYOL: Dmitrovic, Rubén (79′ Omar), Riedel, Cabrera, Romero, Pol, Edu (79′ Urko), Dolan (74′ Roca), Milla (85′ Salinas), Kike (75′ Pickel), Roberto. GOLES: 0-1 Kike (70′), 0-2 Milla (83′) ÁRBITRO: . Amonestó a Colombatto (39′), Reina (59′).