Publicado: octubre 2, 2025, 7:09 am
Jerusalén. Las fuerzas navales israelíes interceptaron ayer barcos de la flotilla que transportaba ayuda a Gaza, incluido el navío en el que viajaba la activista sueca Greta Thunberg, después de que Israel les hubiera ordenado que cambiaran de rumbo.
La flotilla Global Sumud («sumud» significa «resiliencia» en árabe), que se presenta como una «misión pacífica y no violenta», partió de Barcelona a inicios de septiembre y está compuesta por unos 45 barcos con centenares de militantes propalestinos procedentes de más de 40 países.
La flotilla navegaba ayer por el mar Mediterráneo frente a la costa de Egipto y se acercaba a la Franja de Gaza, donde Israel lleva a cabo una ofensiva en represalia por el ataque terrorista de Hamás en suelo israelí el 7 de octubre de 2023.
Israel detuvo a «varios barcos» de la flotilla, sin incidentes, indicó el ministerio de Relaciones Exteriores israelí el miércoles por la noche.
«Varios barcos de la flotilla (…) fueron detenidos con total seguridad y sus pasajeros están siendo transferidos a un puerto israelí», indicó el ministerio en X.
«Greta y sus amigos están sanos y salvos», añadió el mensaje, acompañado de un breve video que muestra a Thunberg recogiendo sus objetos personales, rodeada de hombres armados.
Por su parte, los organizadores de la flotilla denunciaron que «además de los barcos cuya intercepción se confirmó, se perdió la retransmisión en directo y la comunicación con otros barcos».
Global Sumud afirmó trabajar «sin descanso para encontrar a todos los participantes y miembros de la tripulación».
Este fue «un ataque ilegal contra trabajadores humanitarios desarmados», declaró la organización, e instó a «gobiernos, líderes mundiales e instituciones internacionales a exigir la seguridad y la liberación de todas las personas a bordo».
Protestas
Su avance a través del mar Mediterráneo había atraído la atención internacional, ya que países como Turquía, España e Italia enviaron barcos o drones en caso de que sus ciudadanos necesitaran ayuda.
El ministerio de Asuntos Exteriores de Turquía calificó el ataque de Israel a la flotilla como «un acto de terrorismo» que puso en peligro las vidas de civiles inocentes, mientras que en toda Italia hubo protestas espontáneas en respuesta.
Por su parte, el presidente de Colombia, Gustavo Petro, expulsó a la delegación diplomática de Israel en Bogotá.
Todo esto sucede mientras que Gaza sigue siendo bombardeada por Israel.