Publicado: septiembre 30, 2025, 12:15 pm
Ya han salido a la luz las primeras imágenes. Después de que a finales del pasado agosto la revista ¡Hola! llevase en su portada que Anna Kournikova y Enrique Iglesias están esperando su cuarto hijo, la propia publicación ha sacado a la luz las fotografías en las que la extenista rusa ya hace vida normal con la diferencia de que, ahora, tiene una incipiente barriga de embarazada, confirmando la información de que el nuevo bebé de la familia nacerá casi con total seguridad a finales de este mismo año.
Fueron fuentes cercanas a la pareja las que terminaron de certificar unos rumores que se venían barruntando desde principios de verano, cuando la modelo rusa era cazada, junto a sus tres hijos—los mellizos Nicholas y Lucy, de 7 años, y la pequeña Mary, nacida en enero de 2020—, paseando por la calle con una sudadera blanca extraancha, lo cual es algo bastante poco habitual en ella. Los informantes puntualizaron que tanto Enrique y Anna como sus pequeños están más que ilusionados con la noticia de ampliar la familia.
En las nuevas instantáneas, Kournikova aparece junto a su hijo, que va con el uniforme escolar y su mochila a la espalda, mientras ella aprovecha para hacer algunos recados, en una reaparición pública que, destacan desde el citado medio, ha acaparado todas las miradas, principalmente por el look comfy y total black de la exdeportista de 44 años, que ya tiene experiencia en la etapa de premamá.
El nuevo embarazo vuelve a poner los focos en la pareja, a pesar de que siempre han decidido llevar una vida con una discreción absoluta, primando el hermetismo de su privacidad, algo que se verá reforzado en esta nueva e ilusionante etapa de lo que a todas luces es una felicidad plena. Un estilo reservado que ha sido una constante durante toda su historia de amor, que comenzó hace algo más de dos décadas, y con la que han conseguido mantener una fórmula para ser lo más «normal» posible para dos celebrities de su calibre en su refugio que tienen en Miami.
Un vínculo muy sólido en el que es indispensable Bay Point, la exclusiva zona de la ciudad de Florida en la que residen desde que, en 2013, cuatro años antes de que naciesen sus dos primeros hijos, compraron una espectacular mansión, con vecinos como Cher, Ricky Martin o Gloria Estefan, valorada en 20 millones de dólares aproximadamente y que cuenta con cerca de 1.800 metros cuadrados.
La propiedad tiene desde su propia pista de tenis a una piscina privada, pero lo que más llama la atención es un embarcadero en su propio terreno que les sirve tanto para acceder a su yate como para proteger su intimidad de miradas y paparazis, algo a lo que también ayuda el impresionante muro de cinco metros de altura que mandaron construir. De hecho, para Enrique Iglesias, de 50 años, el secretismo de su vida privada es condición sine qua non para vivir allí, donde consigue que sus hijos no vivan el escrutinio perenne de la prensa con el que él sí tuvo que lidiar toda su infancia y adolescencia.
De hecho, este nuevo es el primero de sus embarazos que se sabe antes de que nazcan los bebés. Y quizá el ejemplo más conocido fue la boda de Ana Boyer, hermana de Enrique, con Fernando Verdasco, otro tenista, en 2017. Todo el mundo daba por hecho que el cantante y la modelo acudirían, pero su ausencia motivó multitud de especulaciones sobre una posible ruptura o quizá un rechazo a la exclusiva que habían firmado los novios para vender las fotografías. Pero finalmente la razón era que Anna estaba a punto de dar a luz.
Esa diferencia con respecto a otras estrellas también vertebra su día a día, en el que son acontecimientos imprevisibles si acuden a algún evento o alfombra roja o incluso si suben una fotografía de sus pequeños a las redes sociales. Una vida hogareña total, ya sea en casa trabajando, con su familia, viendo la televisión, paseando con su yate —lo que, según sus vecinos, hace a menudo— o con sus dos perros: Jack, un retriever de Chesapeake, y Mad, un pastor alemán bautizado por una de las películas favoritas del cantante, Mad Max.
Con el nuevo embarazo, por tanto, se espera el mismo nivel de opacidad para con los medios, si bien Enrique Iglesias sorprendió a principios de este mismo mes cuando, tras un concierto en México, regresó a su casa y, en el aeropuerto, fue preguntado por los periodistas allí congregados, para quienes tuvo algunas palabras al preguntarle cómo se sentía tras la exclusiva del embarazo de Kournikova. «Pues con mucha responsabilidad, pero estoy muy feliz y muy emocionado», afirmó el autor de éxitos como Bailando, Experiencia religiosa, Súbeme la radio o Hero. Eso sí, como era de esperar, no dio más detalles, sobre todo al declinar responder si era niño o niña.
