Publicado: septiembre 25, 2025, 10:23 am
Bruselas ha lanzado una alerta sobre el fraude y los riesgos para la seguridad alimentaria en el mercado europeo de la canela. Una investigación del Centro Común de Investigación (JRC) de la Comisión Europea, publicada también en Nature, revela que más del 66% de las muestras comercializadas en la UE presentan irregularidades que van desde incumplir estándares de calidad hasta superar los lÃmites recomendados de sustancias potencialmente tóxicas.
El estudio, que analizó más de un centenar de muestras de canela en paÃses de la UE, Reino Unido, Serbia y Sri Lanka, detectó que «más del 66% de las muestras analizadas infringen la normativa internacional de calidad o la legislación de seguridad alimentaria de la Unión Europea y presentan indicios de fraude o superan los lÃmites legales de cumarina«, según explica el JRC. La cumarina es un compuesto natural presente sobre todo en la canela cassia, y puede resultar tóxica para el hÃgado, especialmente en niños pequeños, si se consume en exceso.
Entre las irregularidades encontradas se incluye la presencia de plomo en un 9,6% de las muestras, cuando el lÃmite máximo legal es de 2 mg/kg, y niveles de cumarina superiores al recomendado en un 29,8% de los casos. Aunque la legislación europea establece lÃmites especÃficos para la cumarina añadida en postres (5 mg/kg) y productos de panaderÃa (50 mg/kg), no existe aún una disposición concreta para la que está presente de forma natural en la canela.
El JRC también halló fraudes de sustitución. Hasta el 9% de las muestras etiquetadas como canela de Ceilán fueron reemplazadas total o parcialmente por canela de Cassia, «una alternativa más barata y de menor calidad, con sabor más fuerte y que contiene cumarina de forma natural», señala la propia organización. En otros casos se detectó que se habÃan usado raÃces, hojas o flores en lugar de la corteza, que es la parte auténtica de la especia.
«Este es un problema ya conocido y que pone de relieve que, desde 2022, poco ha cambiado en cuanto a la situación de las especias. Ya en 2022 la Comisión Europea hizo un estudio similar para otro tipo de especias, como son la pimienta, el comino o la cúrcuma, el azafrán o el pimentón que ponÃan en evidencia un importante nivel de fraude en este tipo de producto», explica Enrique GarcÃa, portavoz de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU).
Tras el informe, la Dirección General de Salud y Seguridad Alimentaria (SANTE) recomienda reforzar los controles tanto en fronteras como en mercados interiores y que los laboratorios oficiales usen un enfoque combinado de técnicas analÃticas para detectar adulteraciones, ya que «ningún método por sà solo es suficiente». La Comisión Europea confÃa en que «los resultados de esta investigación puedan ayudar a la comunidad cientÃfica y a los responsables polÃticos a establecer valores lÃmite para los diferentes componentes de la canela y a definir cuándo una muestra debe considerarse sospechosa. Esto permitirá una vigilancia más rigurosa y ayudará a las autoridades competentes a tomar medidas», según el comunicado.