Publicado: septiembre 21, 2025, 6:30 am
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Nacida un 3 de octubre de 1973 en Bermudas y criada en Inglaterra, está a punto de cumplir sus cincuenta y dos años Lena Headey, que, si bien empezó a despuntar como actriz a principios de los 2000 en películas como Posesión o 300, en la que interpretaba a la reina Gorgo (esposa de Leónidas), se convirtió en una estrella internacional tras ser la elegida para ponerse, en 2011, en la piel de Cersei Lannister en Juego de tronos, la adaptación a serie de la saga Canción de hielo y fuego de George R. R. Martin.
Actriz admirada, personaje de culto y varias veces nominada en los Emmy, Headey llegó a 2019 convertida en una figura clave de la cultura pop.
Sin embargo, el éxito apabullante de la ficción de HBO le pasó una factura que necesitó masticar despacio. En una entrevista a la revista People comentaba hace unos años que, tras la serie, tuvo un período de reflexión acerca del camino que seguiría después, ya que «no sabía qué hacer», así que, finalmente, se decidió por hacer lo que realmente quería: escribir, dirigir, producir y ser muy selectiva con los papeles que asumía, ahora que podía permitírselo.
Bajo el nombre formal de Peephole ha incursionado en la producción, y en 2023 produjo y protagonizó Beacon 23, una serie de ciencia ficción para MGM+, y como directora ha despuntado con The Trap, que fue un corto en 2019 y se convirtió en largometraje en 2023.
Aun así en los últimos años su actividad se divide entre su faceta profesional, donde se permite una libertad de actuación envidiable, con «poca presión y mucha libertad creativa», y su faceta personal, en la que el activismo a favor de causas humanitarias es absolutamente protagonista.
Embajadora de Rescue.org, en 2018, por ejemplo, la pudimos ver acompañando a refugiados sirios en Lesbos en su viaje hacia Alemania, y en los últimos tiempos se ha convertido en una de las voces más firmes contra el exterminio en Gaza, que la actriz califica sin pudor de genocidio.
«¿Cuántas imágenes de niños moribundos necesitamos ver antes de que alguien haga algo?», decía el pasado mes de julio.
Mientras se cierran las producciones de sus últimos trabajos (Ballistic, The Abandons), quien fuera «reina en Poniente» utiliza todo su poder en redes sociales, donde la siguen millones de personas, para recaudar fondos para las familias palestinas.
