Publicado: septiembre 4, 2025, 7:23 am
El Tribunal Superior de Glasgow ha declarado culpable al escocés James Clacher de la violación violenta de dos mujeres a las que conoció a través de aplicaciones de citas. Clacher, de 57 años, fue detenido por la Guardia Civil en Nerja (Málaga), en mayo de 2024, en una operación conjunta con la Agencia Nacional contra el Crimen del Reino Unido.
Este violento violador habÃa fingido su muerte en Escocia y empezado una nueva vida en España bajo una identidad falsa. ResidÃa en Nerja y, según detalló la Guardia Civil, tenÃa un modo de vida muy vinculado al deporte y era una persona muy integrada en la comunidad deportiva de esa localidad de la Costa del Sol. En el momento de su detención estaba practicando calistenia en una zona deportiva de la playa de Nerja.
Este sujeto, calificado como peligroso por la PolicÃa de Escocia, estaba acusado de agredir sexualmente a dos mujeres que habÃa conocido a través de una app de citas. En 2022, pendiente de juicio, intentó fingir su muerte cuando la policÃa escocesa encontró su coche en la orilla de un lago en Escocia.
Posteriormente, la policÃa escocesa determinó que no se trataba de una desaparición involuntaria, sino que el sujeto habÃa huido de su paÃs para evitar su detención y el juicio quedó en suspenso a la espera de encontrarle.
Su destino fue España, concretamente Nerja, donde se instaló bajo la identidad de Johnny Wilson, un expatriado británico fanático del fitness y muy sociable, según relata el diario The Guardian. El periódico ha hablado con trabajadores de un gimnasio de la localidad malagueña que le conocieron bajo su falsa identidad y lo describen como un «hombre agradable», que hacÃa que la gente se sintiera cómoda y se integraba perfectamente en la comunidad local.
El rotativo también ha entrevistado a un expatriado británico residente en Nerja, que se habÃa hecho amigo del falso Johnny Wilson. «Me estaba dando ayuda nutricional y me dijo que habÃa estado en el regimiento de paracaidistas durante diez años y que habÃa venido a España para empezar de cero», afirma este expatriado, de nombre Matt.
«No dio ninguna pista. Pero, en retrospectiva, cada vez que enviaba una foto, nunca se le veÃa la cara», cuenta también Matt, quien asegura que habÃa practicado senderismo con él e, incluso, habÃa ido a comer a su casa.
Según The Guardian, el violador fugitivo habÃa trabajado como jardinero en Nerja y también ganaba dinero organizando clases de yoga en la playa.