Publicado: septiembre 2, 2025, 1:23 pm
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha reconocido que la ofensiva militar de Israel sobre la Franja de Gaza, en la que ya han muerto más de 63.000 palestinos, está «perjudicando» a su aliado en Oriente Próximo ante la opinión pública.
«(Las autoridades israelÃes) van a tener que acabar con esa guerra de una vez. Pero está perjudicando a Israel. No hay duda al respecto. Puede que estén ganando la guerra, pero no están ganando en el mundo de las relaciones públicas, y eso les está perjudicando», ha señalado en una entrevista concedida al portal de noticias estadounidense Daily Caller.
En este sentido, el inquilino de la Casa Blanca ha incidido en que «Israel era el grupo de presión más fuerte hace 15 años, y ahora se ha visto perjudicado. TenÃan control total sobre el Congreso, y ahora ya no lo tienen, me sorprende un poco verlo».
«Hoy en dÃa, no tiene un ‘lobby’ tan fuerte. Pero hoy, tienes, ya sabes, a (la demócrata Alexandra Ocasio-Cortez) AOC más tres, y tienes a todos estos lunáticos, y realmente lo han cambiado todo«, ha agregado al ser preguntado por el creciente escepticismo entre los seguidores jóvenes del movimiento MAGA (‘Make America Great Again’) ante el apoyo de Estados Unidos a Israel.
«Cuento con un gran apoyo israelû
En esta lÃnea, el mandatario estadounidense ha asegurado que «20 años atrás, Israel tenÃa el lobby más fuerte en el Congreso que cualquier otra organización, empresa, corporación o estado que haya visto. Israel era el más fuerte. Hubo una época en la que no se podÃa hablar mal; si querÃas ser polÃtico, no se podÃa hablar mal (de este paÃs)».
Trump ha defendido que «Israel es increÃble, porque cuento con un gran apoyo israelÃ. Lo tengo. Nadie ha hecho más por Israel que yo, incluyendo los recientes ataques a Irán, que acabaron con esa cosa», en referencia a los bombardeos de principios de junio contra instalaciones nucleares iranÃes.
Además, ha lamentado que «la gente se olvidó del 7 de octubre, (…) un dÃa realmente horrible«, en alusión a los ataques del Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) contra territorio israelà que dejó unos 1.200 muertos y 250 secuestrados.