Publicado: junio 7, 2025, 8:23 pm
Según estimaciones de la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM), la incidencia anual del cáncer de colon y recto en nuestro país es de 85 casos por cada 100.000 personas. Y aunque son cifras que han descendido con respecto a las de años anteriores, este tumor supone el 15,1% de los cánceres, afectando más a hombres que a mujeres.
Pero la lucha contra esta enfermedad no se para. En un ensayo pionero a nivel mundial en el que colaboraron seis países, entre ellos Reino Unido, Canadá y Australia, cientos de pacientes (que ya habían recibido tratamiento para la enfermedad) vieron reducido su riesgo de muerte en más de un tercio con solo adoptar un programa de ejercicios.
A algunos participantes del ensayo se les ofrecieron sesiones de asesoramiento quincenales con entrenadores personales durante los primeros seis meses, y mensuales a partir de entonces, mientras que a otros simplemente se les dieron folletos sobre vida saludable.
Los resultados del primer grupo fueron sorprendentes. Después de cinco años, quienes hacían ejercicio a diario tenían un 28% menos de probabilidades de morir, de ver crecer o reaparecer el cáncer. A los ocho años, su riesgo de morir era 37% menor: por cada 14 participantes, el ejercicio evitó que uno muriera.
Estos resultados se anunciaron la semana pasada en la conferencia anual de la Sociedad Americana de Oncología Clínica en Chicago, tal y como recoge el Daily Mail.
Sharlene Gill, experta en oncología gastrointestinal de la Universidad de Columbia Británica, explica: «En los primeros tres meses, el objetivo es aumentar la actividad física más allá de lo que llamamos diez horas MET por semana».
MET se refiere al ‘Equivalente Metabólico de la Tarea’ (por sus siglas en inglés), una unidad científica que mide la energía quemada. Diez horas MET equivalen a unas dos horas y media de caminata rápida o a una combinación de actividad moderada a lo largo de la semana.
Y la caminata rápida, insiste Gill, no tiene por qué ser demasiado agotadora, y añade: «No es exactamente correr, pero tampoco es un paseo. Si vieras a alguien caminando así, pensarías: tiene que ir a algún sitio».
No tiene por qué ser caminar. Diez MET también equivalen a aproximadamente una hora de trote o ejercicio más vigoroso a la semana. Podrían ser tres carreras de 20 minutos, natación o ciclismo. Es simplemente ejercicio aeróbico, no entrenamiento con pesas ni de fuerza, explica la doctora.
El profesor Peter Campbell, epidemiólogo del cáncer del Centro Oncológico Integral Montefiore Einstein de Nueva York, afirmó: «Esto está a la altura de los mejores tratamientos disponibles. Si fuera un medicamento, la gente saldría del edificio para pedirlo para sus pacientes el lunes por la mañana», concluye.