Publicado: abril 8, 2025, 10:23 am
En España, según un estudio cientÃfico publicado en la revista Cancers, la mitad de los casos de metástasis vertebral se diagnostica cuando el paciente ya no puede caminar, lo cual significa que algo está funcionando mal en cuanto a los signos de alerta. Este tipo de tumor vertebral, que puede ser benigno o maligno, suele estar causado por la diseminación de un cáncer desde las mamas, riñón, la próstata o los pulmones.
A pesar de que muchos sÃntomas de este tipo de cáncer son similares a los causados por otras afecciones ‘menores’, como pueden ser los dolores de espalda, los expertos de Mayo Clinic aseguran que es importante que atendamos a la posibilidad de que estas molestias permanezcan en el tiempo y empeoren, no podamos asociarlos a una actividad concreta y el dolor empeora por la noche.
Cáncer de espalda, diferencias según su procedencia
Aunque hemos comentado que en la mayorÃa de los casos este tipo de tumores proceden de otros cánceres, que se extienden hasta la columna, en algunos casos pueden originarse en la columna vertebral, cuando las células de los huesos de la columna desarrollan cambios en su ADN, multiplicándose de forma indiscriminada.
Desde Mayo Clinic explican que algunos ejemplos de tumores vertebrales que nacen en la columna, y no son cancerosos, son el osteoma osteoide, el encondroma o el osteoblastoma. Los que sà son cancerosos son el sarcoma de Ewing, el osteosarcoma y el condrosarcoma.
Cuando los tumores vertebrales son consecuencia de la diseminación de un cáncer que se ha originado en otra parte del cuerpo, se le denomina cáncer metastásico, la mayorÃa de los casos en el cáncer vertebral. El riesgo de padecer un tumor vertebral es mayor en aquellos pacientes que ya han sufrido cáncer o han recibido tratamiento para él, y puede ocasionar compresión en la médula espinal o los nervios periféricos; y debilitamiento de los huesos de la columna, que dificulte la posición erguida.
SÃntomas que alertan de un posible tumor vertebral
Desde la ClÃnica Universidad de Navarra, explican cuáles son los sÃntomas más habituales que podrÃan avisarnos de la presencia de un tumor espinal. Entre ellos, un dolor local que suele empeorar por la noche, puesto que las neoplasias son especialmente dolorosas. También una palpación de la zona afectada, cuando exacerba el dolor, puede alertarnos.
Para que el público general se haga una idea, los sÃntomas de un tumor vertebral podrÃan asemejarse a una hernia discal o a una estenosis de canal como dolor radicular en brazos y piernas. Otros sÃntomas pueden ser la pérdida de sensibilidad, disminución en la movilidad, dificultades para mantener la postura erguida con sensación de debilidad extrema, y pérdida del control de los esfÃnteres.
Por regla general, un tumor de este tipo se diagnostica mediante un estudio radiológico simple, con posibilidad de ampliación mediante tomografÃa y resonancia magnética.