Publicado: agosto 24, 2025, 4:26 pm
Una sesión de entrenamiento de resistencia o de intervalos de alta intensidad (HIIT) aumenta los niveles de mioquinas, una proteÃna producida por los músculos que tiene efectos anticancerÃgenos y que podrÃa reducir la proliferación del crecimiento del cáncer entre un 20 y un 30 por ciento, según un estudio de la Universidad Edith Cowan (Australia).
Además, el autor de la investigación y estudiante de doctorado de la Universidad Edith Cowan, Francesco Bettariga, en una investigación posterior descubrió que al reducir la masa grasa y aumentar la masa magra, a través de ejercicio constante y persistente, los sobrevivientes de cáncer tenÃan una mejor posibilidad de reducir la inflamación, que juega un papel clave en la recurrencia y la mortalidad por cáncer de mama.
Su investigación con sobrevivientes de cáncer de mama midió los niveles de mioquina antes, inmediatamente después y 30 minutos después de una sola serie de entrenamiento de resistencia o de HIIT y descubrió que ambos conjuntos de ejercicios tuvieron un aumento resultante en los niveles de mioquina.
Si bien se esperaban niveles más altos de mioquinas en una población sana, los resultados del estudio demuestran que ambos tipos de ejercicio son eficaces para producir estas mioquinas anticancerÃgenas en supervivientes de cáncer de mama. Además, Bettariga afirma que «estos resultados constituyen una excelente motivación para incorporar el ejercicio como tratamiento estándar en el tratamiento del cáncer».
No obstante, añade que se deberÃan investigar más a fondo las implicaciones a largo plazo de los niveles elevados de mioquina, particularmente en relación con la recurrencia del cáncer.
Asimismo, investigaciones posteriores realizadas por Bettariga demostraron cómo los cambios en la composición corporal, fruto del ejercicio constante, podrÃan influir en la inflamación, que promueve la progresión tumoral al influir en la proliferación celular, la supervivencia, la invasividad y la metástasis y, además, inhibe la función inmunitaria.
«Si logramos mejorar la composición corporal, tendremos mayores posibilidades de disminuir la inflamación porque estaremos mejorando la masa magra y reduciendo la masa grasa, que es la encargada de liberar marcadores antiinflamatorios y proinflamatorios«, apunta Bettariga. Sin embargo, el investigador matiza que «desafortunadamente», las soluciones rápidas para reducir la masa grasa no tendrÃan los mismos efectos beneficiosos.
AsÃ, concluye que «nunca se debe reducir el peso sin hacer ejercicio, porque se necesita desarrollar o preservar masa muscular y producir estos quÃmicos que no se puede hacer solo con la dieta».