Registro  /  Login

Otro sitio más de Gerente.com


Trump le quita poder a Musk ante el caos de los recortes

Publicado: marzo 6, 2025, 7:27 pm

El presidente Donald Trump convocó de manera inesperada a su gabinete este jueves para delimitar el papel de Elon Musk en la reestructuración del Gobierno federal.

En la reunión, que no estaba en la agenda oficial, Trump dejó claro a sus secretarios que la autoridad final sobre despidos y contrataciones recae en ellos y no en el magnate.

El encuentro se produjo tras semanas de incertidumbre sobre el alcance del poder de Musk, quien encabeza el llamado Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE, nombre que coincide con el de una criptomoneda) y ha impulsado despidos masivos en varias agencias federales.

La instrucción de Trump busca contener el descontento dentro de su propia administración y en el Capitolio, además de servir como respuesta a críticas incipientes de legisladores republicanos y varios reveses judiciales que han cuestionado la legalidad de las decisiones de DOGE.

El cambio de postura de Trump representa un límite a la influencia de Musk en la administración, aunque sin desautorizarlo por completo. El propio empresario asistió a la reunión de gabinete, al igual que en la primera sesión, consolidando su presencia en las decisiones clave del Gobierno.

Tras el caos inicial en estas semanas del nuevo mandato de Trump, con despidos masivos, cierre de departamentos y mensajes contradictorios, el presidente dice ahora que prefiere que sus secretarios empleen un bisturí, y no un hacha, para los recortes.

«He indicado a los secretarios y líderes de cada departamento que trabajen con DOGE en medidas de reducción de costos y personal», escribió Trump en una publicación en redes sociales. «A medida que los secretarios conozcan mejor a quienes trabajan en sus agencias, podrán decidir con precisión quién se queda y quién se va».

«Es fundamental reducir el tamaño del gobierno al nivel que corresponde, pero también es importante conservar a las personas más capacitadas y productivas», añadió.

Musk ha ido admitiendo que su equipo cometerá errores. En la primera reunión del gabinete, llegó a decir que se habían cortado involuntariamente los fondos a un programa que combate el ébola en África. Se enviaron correos de despido a personal militar y de inteligencia que después fueron retirados.

También se tomó la decisión de despedir al 17% del personal de la Administración Nacional de Seguridad Nuclear, lo que afectó a ingenieros, técnicos y expertos en seguridad nuclear encargados de salvaguardar las 5.000 ojivas nucleares de Estados Unidos. La reacción inmediata de legisladores de ambos partidos llevó a la Casa Blanca a revertir la mayoría de los despidos en menos de 24 horas.

Todo esto ocurre en medio de una aparente incertidumbre sobre quién manda realmente en ese departamento de recortes. Trump ha repetido que es Musk, y de hecho lo afirmó en su discurso del martes en el Capitolio.

Sin embargo, ante los tribunales, en diversas denuncias, la Casa Blanca alega que Musk solo provee al presidente de asesoramiento y que la directora del departamento es Amy Gleason, una funcionaria poco conocida. La razón es que, para ocupar un puesto de tal magnitud, responsable de una reestructuración profunda del gobierno, Musk debería ser antes confirmado por el Senado.

El mensaje de Trump apunta a trasladar más poder y responsabilidad a los secretarios de gabinete, limitando la influencia de DOGE en la reestructuración del gobierno. Hasta ahora, este departamento de la Casa Blanca había intervenido directamente en las agencias, recopilando datos y ordenando la elaboración de listas de despidos, una práctica que ha generado un creciente escrutinio legal y político.

El presidente respaldó el trabajo del magnate, pero matizó su papel al enfatizar que DOGE debe limitarse a un rol consultivo. Musk aceptó públicamente la nueva directriz y reconoció «errores» en la implementación de recortes.

Las divisiones son evidentes. Cuando Musk envió a finales de febrero un mensaje a todos los funcionarios del Gobierno federal pidiéndoles que resumieran en cinco puntos los logros de la semana anterior, varios departamentos, incluido el Pentágono y el FBI, instaron a su personal a no responder. Solo después de la intervención de Trump cedieron, aunque sin mostrarse muy partidarios de las maniobras de Musk.

Related Articles